La bolsa europea perforó uno de sus soportes clave situado en los 4.170 puntos del EuroStoxx y abre la puerta a que el selectivo de referencia en el Viejo Continente ahonde su pérdida hasta los 4.000 puntos.
Con todo, esta situación es indicada, según los expertos, para entrar en bolsa debido al positivo resultado de la ecuación rentabilidad-riesgo, que arroja un potencial del 10% y un peligro de caída del 5%. Asimismo, este momento propicio coincide con el último trimestre de año que históricamente es el más alcista en términos de rendimiento, con ganancias cercanas al 2% en cada uno de los meses, según la media de los últimos 30 años. Pese a ello, la ralentización de la economía, y el hecho de que el EuroStoxx acumule ya una ganancia de casi el 11% en el año invita a ser cauteloso.