
El lunes publicaba un tuit tras conocer el dato acumulado del fondo de inversión que asesoramos en el año más bajista de mercado desde Lehman y tras el peor primer semestre de Wall Street desde los años setenta. "Tressis Cartera Eco30 termina julio con un 1,48% de rentabilidad en 2022. El 31,16% tras casi cuatro años... El éxito no es definitivo. El fracaso no es letal. Es el valor para continuar lo que cuenta", conversación de @JoaquinGomezC.
En el caso del Eco30, el valor es defender una filosofía de inversión consistente en seleccionar una cartera diversificada de compañías internacionales de calidad. La convicción en los negocios de estas empresas y no en pensar simplemente que alguien va a pagar más por ellos.
En la selección del Eco30 ningún sector puede tener un exceso de representación sectorial para evitar que las ideas maduren o se desperdicien a la vez, y el objetivo es inequívoco: duplicar la rentabilidad cada década se entre cuando se entre. Esa es la esencia de la cartera Eco30, el principio sobre el que subyace cada revisión de cartera que debe ofrecer una expectativa de rentabilidad anualizada del 7% para llegar por efecto del interés compuesto a duplicar la inversión cada década.
¿Es el momento para entrar?
Con el comportamiento del Eco30 en 2022 hay mucha más gente que me pregunta si es el momento para entrar. A los más especuladores les recomiendo otras herramientas de elEconomista.es como Ecotrader o la propia Cartera de elEconomista.es, construidas con una visión más tendencial, más táctica del mercado y de medio plazo.
Para quienes aceptan la visión de largo plazo, y menos de largo plazo no son cinco años, les sugiero nuestra versión estratégica de mercado. Nunca en los diez años que construyo el Eco30, que antes de fondo es índice calculado por Stoxx, he visto ratios tan atractivos como los de mediados de julio.
Estoy convencido de que lo que hemos visto en las últimas semanas es un rally en un bear market y que no corresponde al inicio de un bull market. En este escenario hay que aplicarse ese mandamiento extraído de Benjamin Graham que es promediar el mismo coste monetario. Siempre que hago esta introducción continuo con un ejemplo y una regla que creo que lo explican mejor.
Si soy consciente de que todos los años seré capaz de destinar al ahorro una cantidad similar, lo que tengo que hacer es promediar esas aportaciones. ¿Pero cómo hacerlo mejor? Si uno es un inversor que sigue el mercado, que conoce sus tendencias, estoy seguro que es el mejor capacitado para buscar las entradas. Si por el contrario uno es un inversor que no sigue todos los días el mercado, o peor aún y más habitual, lo sigue pero es incapaz de entrar cuando estos sufren fuertes correcciones; lo mejor es la regla de los 90 días. Cada tres meses se aporta a los productos elegidos. Repetir años este ejercicio es la mejor clase de inversión que se puede tomar.