Opinión

El escudo del BCE calma al mercado

Christine Lagarde, presidenta del BCE

La pasada semana, Christine Lagarde trató de emular a su antecesor en el cargo, Mario Draghi, cuando en 2012 pronunció la mítica frase: "El BCE está preparado para hacer todo lo que sea necesario para preservar el euro y, créanme, será suficiente".

Entonces eso bastó para resolver la grave crisis de deuda en la eurozona. Pero el efecto de Lagarde con su "haré el trabajo que sea necesario para doblegar los precios y evitar la fragmentación financiera en la eurozona" ha tenido un efecto muy diferente. De hecho, desde el pasado jueves, los bonos de países como España, Italia y Grecia se han disparado, lo que ha obligado al BCE a realizar una reunión de urgencia. Por fortuna, tras ella, el eurobanco ha dado algunas pistas sobre sus actuaciones futuras que han bastado para calmar al mercado, aunque sea de forma momentánea. Sin duda, supone un regalo para los pasivos de los países periféricos que el BCE reoriente las reinversiones a la deuda que está más tensionada. Este mensaje junto con el de "acelerar" los trabajos de diseño de la nueva herramienta antifragmentación en Europa ha reducido la tensión en el mercado. Así lo indica la prima de riesgo española, que ayer cayó 12 puntos hasta las 123 unidades.

El eurobanco frena el alza de las primas de riesgo con el anuncio de una herramienta que protegerá la deuda periférica

No obstante, el hecho de que los rendimientos del bono español e italiano sigan en niveles preocupantes alerta de que el escudo del BCE no aguantará mucho. Para ello, será necesario que el organismo lance una herramienta en la que la deuda periférica gane peso (en términos relativos) en el balance del BCE. Con todo, el resurgir visto en las primas de riesgo debe llevar a gobiernos como el que ahora rige en España a entender la importancia que tiene reducir los importantes desequilibrios que presentan las cuentas públicas.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky