
Siemens Energy estudia lanzar una OPA sobre el 33% que no controla aún en Gamesa para excluirla de cotización. Con esta operación, la firma alemana busca reducir las pérdidas millonarias que la filial española genera por el alza de los costes de la energía y las materias primas. No se puede dar por hecho que el mayor control de la matriz solucione los problemas de Gamesa.
Pero lo que sí es ya seguro es el doble daño que esta maniobra generará. Por un lado está el perjuicio en la economía y el empleo que provocará el traslado de la sede social de la firma de nuestro país. Pero además, el hecho de aprovechar los bajos precios del fabricante de aerogeneradores en bolsa para lanzar la opa supondrá un aluvión de pérdidas para los minoritarios.