Banco Santander cerró el primer trimestre con una cartera crediticia a nivel global de 1,01 billones, con un aumento del 4% frente al final de 2021 y del 8% interanual.
Además de superar la barrera del billón, este impulso permite a la entidad ser líder mundial en este apartado, desbancando a gigantes como JP Morgan o HSBC. La acertada estrategia comercial de la entidad cántabra ha sido fundamental para el crecimiento del 6% mostrado en hipotecas y consumo a particulares. Por si fuera poco, Santander ha impulsado un 11% los préstamos a clientes corporativos e institucionales. Este buen desempeño del negocio crediticio sitúa a la entidad en excelente posición para aprovechar el contexto favorable que para el sector supone la normalización monetaria.