Seat arranca su servicio de alquiler de vehículo compartido por días y horas en un único concesionario de Madrid. Lejos de lo que parece, este paso dista de ser solo una prueba piloto, puesto que ya está definido el objetivo de llevar el carsharing a todos sus puntos de venta.
Es más, el fabricante también logra sacar partido de Respiro, la plataforma de alquiler flexible que adquirió en febrero. Esta compra supuso la irrupción de Seat en la nueva movilidad que demandan las urbes digitalizadas.
De ahí que el servicio suponga un impulso en movilidad que sitúa al fabricante a la altura de rivales como PSA o BMW. Pero, sobre todo, la iniciativa demuestra el acierto de Seat al seguir diversificando, pese a su reciente récord de venta de vehículos.