Visión, misión y valores. ¿Son los valores una mera cita, más o menos bonita, una nota de color, más o menos viva en el paisaje de la memoria de nuestra empresa? ¿Son un adorno que ponernos en el pelo o una corbata de moda cuando nos miramos en el espejo de nuestra personalidad como compañía?
En esta sociedad tan competitiva parece que los únicos valores que de verdad importan son los que cotizan en bolsa. Como empresarios e hijos de empresarios reivindicamos el rol de la empresa como agente de cambio e impulsor del progreso. Pero no todo vale. Hemos heredado una visión que conjuga la rentabilidad económica con la aportación de valor a la sociedad, dos elementos que van de la mano.
Calidad Pascual cumple cincuenta años y en este aniversario nos gustaría agradecer a todos aquellos que han formado parte de nuestra historia y a todos los que han colaborado en construir lo que hoy es nuestra compañía. A los consumidores y a la sociedad por su decisivo papel en nuestro pasado, presente y en el incipiente futuro que ya está naciendo. Este reconocimiento queremos hacerlo poniendo el foco en cuatro historias anónimas, pero con nombres propios.
Una emprendedora de la economía colaborativa, un oncólogo infantil, el fundador de una ONG que usa la tecnología en beneficio de los que más lo necesitan y una atleta paralímpica. Auténticos héroes sociales que ejemplifican los valores que queremos transmitir. Pasión, cercanía, innovación e integridad, historias humanas que estamos seguros no nos dejarán indiferentes.
Hace cincuenta años Pascual era en Aranda de Duero una empresa incipiente, apegada al terreno, en la que todos nos conocíamos y podíamos llamarnos por nuestro nombre propio. Un negocio que colaboraba con otras pequeñas empresas de la Ribera y entre todos hacían territorio, hacían país. Esta cercanía, adaptada a los códigos del siglo veintiuno, es la que hemos identificado en Mireia Badia, CEO y co-fundadora de Grow.ly, plataforma que conecta empresas que necesitan un préstamo con pequeños inversores. Esta joven emprendedora apuesta por el crowdlending para ayudar a financiar proyectos empresariales. Un claro ejemplo de cómo dicha actitud ha logrado conectar a pymes e inversores, beneficiando a ambos y al tejido empresarial del país.
Estábamos tan motivados porque creíamos en el proyecto de empresa y lo hacíamos nuestro. Contra viento y marea, venciendo las barreras técnicas y económicas en el envasado de leche. Convencidos de que para que pudiera surgir lo posible era preciso intentar una y otra vez lo imposible. Pura pasión. Aunque quizás no tanta como la que desborda Antonio Pérez, jefe de Servicio de Hemato-Oncología Pediatría del Hospital Universitario La Paz, en su lucha diaria contra el cáncer infantil. Mejorar la calidad de vida es importante, pero salvar una vida no tiene precio.
¿No fuimos pioneros al lanzar la leche uperisada y envasada brik? Nos consideramos especiales por formar parte de un proyecto que buscaba cambiar los hábitos de consumo de los españoles. Como nos demuestra Guillermo Martínez con una simple impresora 3D. El valor de la innovación sobresale en la ONG fundada por este joven ingeniero que desarrolla prótesis gratuitas para personas del tercer mundo. Un sueño que solo es posible llevar adelante con tesón, visión de futuro y una inteligente aplicación de los avances tecnológicos en favor de los demás.
Pascual ha tratado de ser siempre calidad humana e integridad, como la que derrocha Sara Andrés, nuestra atleta paralímpica. Y con ella su compromiso con el deporte como herramienta de transmisión de valores, el afán de superación, el compañerismo y la salud. "A veces la vida nos detiene los pies sólo para que descubramos y usemos nuestras alas".
También dentro de Pascual tenemos historias que merecen la pena ser contadas. Nuestro compañero Pedro Serrano es un personaje cercano, alegre, atento, único... desconocido pero inconfundible, y al que hemos dado protagonismo en nuestros medios digitales por simbolizar con mayúsculas lo que aspiramos a ser.
Todos estos valores los hemos querido resumir al celebrar nuestro aniversario con un concepto, la "Calidad Vital". Una actitud, una forma de entender la vida al servicio de los demás. De crecer como personas y de dar lo mejor de nosotros hacia la consecución de un fin común.
Personas primero y por ende emprendedores. Esto es "Calidad Vital". Recibimos un legado de nuestro padre que deseamos trascienda a nosotros y a nuestros hijos. Hemos elegido ejemplos de personas cuyos testimonios nos permitirán dialogar, debatir y reflexionar. Empleados, clientes, consumidores, inversores...todos quieren saber con qué clase de compañía se relacionan verdaderamente, con quién hacen negocios, qué subyace detrás de una marca, cuál es su verdadero propósito. Calidad Pascual no existiría si no tuviera valores. Los valores cotizan claramente al alza porque, desde el principio, somos lo que hacemos y cómo lo hacemos. Somos Calidad Vital.
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