
Repsol, Iberdrola, Orix y Brookfield son los candidatos que pujarán por adquirir X-Elio por unos 1.000 millones. No obstante al proceso de venta acudieron 45 firmas. Este elevado interés es comprensible. Primero, porque se trata de una de las principales plataformas de energía solar fotovoltaica de España, con 455 MW para desarrollar tras las últimas subastas.
Semejante cartera constituye por sí sola un evidente beneficio para firmas como Repsol, ya que potencia su negocio eléctrico. Pero, además, la reciente venta de sus plantas solares en Japón pone de relevancia la capacidad de X-Elio para desarrollar proyectos atractivos a nivel internacional. Esta fortaleza, junto a los casi 500 MW que la firma posee en México y EEUU, auguran una reñida pugna final.