
Turquía vive una complicada situación económica que llevó a Moody's recientemente a rebajar la calificación de los principales bancos turcos, entre ellos el Garanti (controlado al 50% por BBVA). Pero, además, el problema se multiplica para estas entidades por su alta exposición a sectores muy endeudados.
Así, la crisis de la mayor teleco del país, Turk Telecom, salpica a Garanti hasta el punto de que tiene que participar en su rescate tomando una participación del 12 por ciento en la empresa.
No es el único caso: los problemas del holding empresarial Dogus también afectan directamente a Garanti. Con tantos frentes abiertos, vuelve a ponerse de manifiesto el alto riesgo que BBVA asumió al perseguir una participación tan alta en la entidad.