El tono es más positivo que negativo mientras no se dé un paso claro en la dirección que anhelan los 'osos'.
Ni la política norteamericana, ni la italiana, hicieron mella en el ánimo bursátil esta semana. En momentos como estos ayuda llevar 19 años frente a una pantalla: ya lo has visto antes. Nunca viví un mercado alcista en el que no me dieran motivos continuos para dudar de él -ni uno bajista cuando está azotando duro, todo sea dicho-, o al menos en el que no se buscara bajo las piedras un motivo para ello. Nuestro futuro nos obsesiona, y está ligado al dinero. Por tanto, cualquier cosa es buena para vender y amarrar unas pequeñas ganancias... Por otro lado van las tendencias y los análisis de fondo.
Pese a tener claro lo que iba a pasar en la apertura semanal, no dudé ni por un segundo y planteé otra operativa compradora más para la apertura del lunes. Si algo baja en una tendencia alcista, que es lo que tenemos a día de hoy, lo más probable es que -salvo que se pierda una referencia importante y muchas veces incluso con ello- se te esté ofreciendo una señal de compra.
Seguimos en una dinámica exactamente igual a la vivida desde principios de agosto: Wall Street en lateral, y sin embargo el Nasdaq avanzando con comodidad. Europa, sostenida por una renta variable periférica que está capitaneada por España y a la que sigue de cerca Italia -que el viernes cerraba en máximo del año, pues ahora resulta que Berlusconi es sólo otro esperpento en el hemiciclo-. Buen tono relativo en los emergentes, lo que sigue viniéndole bien a la inercia de fondo a nivel general; y un nuevo parón para Japón, seguramente la parte más apática de la renta variable en lo que al corto plazo se refiere. El tono es más positivo que negativo mientras no se dé un paso claro en la dirección que anhelan los osos. La ruptura alcista de los 2.935 puntos del EuroStoxx 50, donde la corrección en términos de dificultades de fondo puede esperar, pediría un pasito más al frente, del 3 ó 4 por ciento, para las bolsas del Viejo Continente. Al otro lado del charco no veo problemas mientras se mantengan los 3.735 puntos del Nasdaq Composite.
Más en Opinión