Reducir costes para maximizar resultados. Express, la nueva compañía aérea de precios reducidos de Iberia, seguirá la senda marcada por otras aerolíneas de bajo coste competidoras y no ofrecerá ningún tipo de servicio a sus pilotos y tripulantes de cabina. La decisión supone que los trabajadores deberán recurrir al bocadillo elaborado en casa o adquirir los productos que ofrece la propia compañía para saciar su apetito, ya que la operativa de la compañía sólo establece veinticinco minutos entre la llegada del vuelo y la salida del siguiente, un corto espacio de tiempo que no permite abandonar la aeronave. Mantener los privilegios de los antiguos brahmanes resulta tan ofensivo como negar un tentempié a profesionales que transportan seres humanos.