La compra de Air Europa por parte de Iberia se retrasa mientras Bruselas prosigue su exigente escrutinio de la operación. Pero no es ése el único problema de la aerolínea propiedad de la familia Hidalgo.
No en vano muestra los peores registros de Europa en cuanto a la recuperación de sus niveles de tráfico, inferiores aún en un 50% a su volumen propio de 2019. Es una situación inaudita considerando la rápida reactivación que muestran las rutas trasatlánticas, muy importantes para el negocio de Air Europa. Los analistas se sorprenden ante la pasividad de la empresa para aprovechar esa situación más propicia. Esa inacción delata que la empresa parece fiarlo todo a un segundo rescate de la Sepi que no se puede en absoluto garantizar.
