Opinión

Una recuperación todavía frágil

A pesar de que las perspectivas mejoran, la recuperación aún es débil

Las previsiones económicas que Bruselas hará públicas hoy incluyen notables mejoras para España. El pronóstico de avance de su PIB en 2021 se sitúa ahora en el 5,9% (tres décimas más de lo esperado el pasado febrero). Con todo, será el año próximo cuando la recuperación se consolide, gracias a un crecimiento del 6,8% (muy superior al 5,3% augurado hasta ahora).

Sin duda, hay base para el optimismo de la Comisión. Tras el traspié sufrido entre enero y marzo, los indicadores adelantados apuntan a un mejor comportamiento de la economía española en este trimestre. Es el caso del registro de creación de empresas, que encadena dos meses de avances interanuales (un 4,2% sólo en abril) a los que contribuye incluso un sector tan afectado por la pandemia como la hostelería. Conviene, no obstante, mantener la cautela a la hora de estimar el comportamiento futuro del PIB español. No debe olvidarse que las nuevas previsiones de la UE incluyen el efecto de las ayudas europeas, y estos fondos están aún tramitándose. Debe, además, tenerse en cuenta lo mucho que se juega nuestro país este verano. A las puertas de la temporada turística el desordenado fin del estado de alarma amenaza con nuevos rebrotes del virus capaces de comprometer un periodo vital para tan importante sector. Y el otoño tampoco se libra de incertidumbres.

El mayor optimismo de la UE sobre el avance del PIB español no implica que todas las amenazas se hayan evaporado

Todo apunta a una revisión del programa de estímulos del BCE en ese periodo si persiste el repunte de la inflación que ya llevó el IPC alemán al entorno del 3%. Una política monetaria más estricta supone una amenaza para una economía como la española cuya deuda pública llegará al 124% en 2022. La recuperación, por lo tanto, aún muestra numerosos flancos débiles.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky