El Gobierno continúa sin revelar datos sobre cómo canalizará las nuevas ayudas, por valor de 11.000 millones, que destinará a "mejorar la solvencia" de los sectores más golpeados por la crisis, en especial el turismo y la hostelería.
Con todo, ante la previsible ausencia de transferencias directas, son numerosos los indicios de que las quitas en los préstamos ICO ya concedidos tendrán un importante peso. Es más, resulta ya posible estimar qué efecto tendrán esas condonaciones parciales en el sector financiero español. Se antoja obvio que aquéllas se someterán a determinadas condiciones, y no se aplicarán al total de las empresas que han recibido los más de 100.000 millones liberados a través de los créditos ICO, desde el inicio de la pandemia. También debe recordarse que los bancos sólo asumen, aproximadamente, un 20% del riesgo asociado a dichos préstamos. Sin embargo, pese a estos límites, el impacto con el que las quitas amenazan a los bancos puede llegar a los 5.500 millones. Sin duda, el sector se ha esforzado, desde el inicio de la crisis, por contar con un cuantioso colchón de provisiones, que supera los 8.000 millones. Ahora bien estas reservas se hicieron en previsión de fuertes alzas de impagos crediticios directamente ligadas a la evolución de la pandemia, que aún son susceptibles de producirse. Las posibles quitas en los ICO constituyen un extra hasta ahora no previsto, inédito en la UE (ya que ningún país de nuestro entorno lo aplica), que llegará en pleno ajuste interno de la banca española, aún muy necesitada de reducir sus estructura de costes y elevar su mermada rentabilidad.
El impacto de las posibles condonaciones en los créditos ICO creará inestabilidad en el sector financiero y en la economía
Ni el sector financiero, ni el conjunto de la economía, puede permitirse unas quitas de efecto tan desestabilizador.
