
La Comisión Europea dirige un claro mensaje a los 27 Estados miembros de la UE, en una carta directa para cada uno de sus Gobiernos. En las misivas, el Ejecutivo comunitario insta a que los países a que mantengan el año próximo los estímulos de todo tipo que han desplegado en 2020 contra los estragos de la crisis del Covid.
El mandato de Bruselas equivale a todo un reconocimiento de que la reactivación económica que se descontaba hasta ahora para 2021 es cada vez más irrealizable. A la espera de los indicadores adelantados de actividad de la eurozona, que hoy se conocerán, puede darse por descartada la recuperación en forma de V asimétrica sobre la que el Gobierno español informaba a la Comisión en sus previsiones del pasado mayo. Es más, en el caso español, las peores perspectivas para el año que viene plantean dificultades especialmente graves. En el lenguaje técnico de la UE, bajo la referencia genérica a "estímulos", subyace la alusión al catálogo completo de ayudas (el llamado escudo social) desplegadas en 2020. Bruselas, por tanto, demanda que iniciativas tan variadas como los Ertes ligados a la crisis, los avales públicos o los subsidios a los autónomos actúen también en 2021. Sin embargo, las reticencias de Economía sobre la prórroga de los Ertes de fuerza mayor, cuya vigencia vence en sólo una semana, basta para delatar las grandes dificultades que el Gobierno ya tiene en la actualidad para sostener la financiación de estos expedientes.
La Comisión Europea insta a prorrogar unos estímulos contra la crisis que al Gobierno ya le resulta difícil sostener
Es un problema que los 21.300 millones provenientes del fondo europeo SURE no bastarán para paliar. El Gobierno se enfrenta así a un 2021 aún más difícil de lo esperado, con una recesión más severa y aquejado ya de graves problemas de liquidez para sostener el escudo social.