Opinión

Virus e ideología

Muchos han aprovechado el virus para lanzar mentiras y especulaciones

El virus que llegó, como los Reyes Magos, de Oriente ha traído consigo no sólo gravísimas tragedias, muy largos encierros y miedos sin cuento, también han venido con él mentiras y comentarios infumables. Por comenzar por las mentiras salidas (en términos usados por Javier Sampedro) desde "un ejército de bots y larvas humanas de moralidad inmadura subcontratadas por los partidos políticos que tienen gran capacidad de penetración social entre los adictos y las capas más incultas de esta sociedad injusta".

La gran mentirosa en este asunto del virus chino se llama –de momento- Judy Mikovits, que es doctora en bioquímica por la Universidad George Washington y una irresponsable de muchos quilates. Corre por ahí un video donde esta señora asegura que las muertes por coronavirus no lo son a causa del virus y que las mascarillas, en lugar de proteger, activan al agente infeccioso. Culpa, además, a Anthony Fauci, jefe de enfermedades infecciosas de los Institutos Nacionales de Salud estadounidenses de haber causado millones de muertes por sida. En efecto, mentiras y calumnias.

Luchar por la cobertura universal de derechos básicos, como trabajo y salud

Pero a quien esto escribe lo que le preocupa aún más que las mentiras son los profetas. Por ejemplo, se habla de "marxismo microbiano" porque algunos analistas de izquierda sostienen que epidemias como la que estamos sufriendo explican las transformaciones de nuestras sociedades y no las estructuras económicas, los movimientos sociales o la influencia de las ideas políticas. El más conocido de estos "microbianos" es Frank Snowden, historiador de la Medicina y profesor en Yale, que en un libro titulado Epidemia y sociedad sostiene que las epidemias explican desde el declive de Atenas, la caída del Imperio romano, el hundimiento de las civilizaciones precolombinas y hasta el fracaso de Napoleón en Rusia.

Entre estos profetas no podía faltar Noam Chomsky, que es a la vez un gran lingüista y un politólogo medio imbécil que esta vez –cómo no- echa la culpa de la pandemia no al coronavirus sino al neoliberalismo.

En sentido contrario pero igualmente increíble se mueve David Harvey, quien sostiene que las medidas contra la plaga en China fueron "invasivas, autoritarias y poco delicadas" y, sin embargo, minimiza el salvajismo del capitalismo chino. Además, pronostica que en EEUU la pandemia será enfrentada con un paquete de medidas "bastante más socialista que cualquier cosa que pudiera proponer Bernie Sanders", auspiciado todo ello –según él- nada menos que por Donald Trump.

Lo peor de todas estas especulaciones es que están cargadas de ideología, lo que en roman paladino quiere decir que no valen ni para tomar… una cerveza. Para salirme de ese barrizal tomaré dos ejemplos que contradicen a los enumerados más arriba. Se trata de dos mujeres, Judith Butler y Martha C. Nussbaum, neo marxista la primera y liberal la segunda. Ellas se han olvidado de sus respectivas ideologías y, según Rafael Rojas, ambas defienden:

"Luchar por una cobertura universal de derechos básicos –salud, educación, vivienda, trabajo, medio ambiente sano, paridad de género…- lo cual es más coherente y eficaz que oponer a la decadente hegemonía de EEUU la naciente de la China de Xi o la Rusia de Putin".

Pues, en tiempos de confusión y de pandemia, bienvenidas sean estas señoras razonables y democráticas.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky