
La logística es cada vez más un generador de empleo y riqueza: supone ya el 8% del PIB español y da trabajo a un millón de personas, según el INE. La relevancia del sector se hace patente también en su papel clave para la productividad de muchas empresas. En sectores como el farmacéutico, alimentación, textil, gran consumo, electrónica, o cualquier e-commerce, contar con una buena gestión logística se ha convertido en una ventaja competitiva.
La logística es un sector vinculado directamente a los ciclos económicos y por ello vive un momento de especial complejidad. La guerra comercial de Estados Unidos o el Brexit añaden retos a un sector de por sí pendiente de la optimización constante y la reducción de tiempos de entrega en un mundo cada vez más globalizado, donde la tendencia de compra online crece y las necesidades de circulación de productos serán cada vez más frecuentes.
Por ello, es fundamental construir cualquier gestión logística sobre pilares sólidos, con el apoyo de un partner logístico de confianza. Estas son las seis claves que, desde ID Logistics, consideramos imprescindibles para el éxito de la gestión logística empresarial.
1. Innovación
Sería imposible abordar las crecientes exigencias logísticas sin el apoyo de la innovación y la tecnología. El sector está inmerso en un proceso de transformación digital imparable, que supone tantos retos como oportunidades. Tecnologías de big data, sensorización o drones para realizar inventarios pasarán de ser ventajas competitivas a necesidades básicas del proceso logístico. Los más avanzados en esta transformación serán los primeros en superar con éxito los nuevos retos del sector.
2. Anticipación y flexibilidad
Vinculado a la tecnología, las herramientas de analítica de datos ayudan a pronosticar la demanda para planificar los recursos necesarios. Esto resulta especialmente útil en picos estacionales de ventas, como las rebajas, Navidad o el Black Friday. Ajustar al máximo la predicción de recursos logísticos conlleva, además, un ahorro de costes y mayor productividad.
3. Automatización y robotización
La exigencia de acortar plazos de entrega debe convivir con modelos que garanticen la rentabilidad. En este sentido, la incorporación de sistemas de mecanización es fundamental: desde brazos robóticos hasta robots colaborativos que ayudan a los operarios, la mejora de la eficiencia operativa es notable gracias a estas tecnologías. La capacidad de inversión de los partner logísticos es un factor crítico en esta etapa.
4. Logística inversa
Tan importante como gestionar eficientemente un pedido es tramitar su devolución, algo que ocurre prácticamente a diario. El cliente da por hecho su derecho a devoluciones especialmente en el mundo del e-commerce. Una logística inversa mal gestionada puede convertirse en un grave problema.
5. Soluciones inmobiliarias y gestión eficiente del suelo
El coste del suelo aumenta progresivamente, fundamentalmente por la falta de inversión y de nuevos espacios logísticos. Contar con ubicaciones estratégicas, bien preparadas y comunicadas, es realmente clave. Apoyarse en un partner logístico con experiencia, con la capacidad de construir y promover naves y entregar proyectos llave en mano puede ayudar a que las empresas tengan plataformas profesionalizadas, que cubran sus necesidades a largo plazo.
6. Sostenibilidad
Reducir la huella de la actividad logística es relevante por responsabilidad social pero también por el propio compromiso de las empresas logísticas con el entorno y con la sociedad en general. La conciencia medioambiental se ha convertido en un factor decisivo para muchos a la hora de adquirir un producto. Soluciones como el transporte de carga completa, los megacamiones, o los vehículos de gas, contribuyen a la sostenibilidad, pero también mejoran la eficiencia y la competitividad. La construcción de almacenes más eficientes energéticamente, que combinen diversas fuentes de energía y promuevan soluciones a largo plazo para un mundo logístico cada vez más verde.