
Mi fe y afición respecto a las encuestas de opinión son ínfimas, pero algunas preguntas y respuestas sí me interesan, especialmente aquellas que desnudan la subjetividad de los entrevistados cuando se les pregunta acerca de situaciones sociales. Por ejemplo, en el último Barómetro del CIS (junio de 2019) se pregunta: "Refiriéndonos a la situación económica general de España, ¿cómo la calificaría Ud.: muy buena, buena, regular, mala o muy mala?" El 9,1 por ciento califica la situación general como buena o muy buena, mientras que la define como mala o muy mala el 39,8 por ciento.
Comparemos esos resultados con los que se obtienen de las respuesta a la siguiente pregunta que se refiere a la situación personal del entrevistado: "¿Cómo calificaría Ud. su situación económica personal en la actualidad: muy buena, buena, regular, mala o muy mala?" La situación personal de los entrevistados es calificada por ellos mismos como buena o muy buena en un porcentaje del 33,8 frente a un 16,4 por ciento que la califica como mala o muy mala. En otras palabras: el 9,1 por ciento dice que la situación económica de sus compatriotas es buena o muy buena frente a un 33,8 por ciento que dice de sí mismo que tiene una situación buena o muy buena. Todo lo contrario ocurre a la hora de calificar como mala o muy mala. La personal mala o muy mala llega tan solo al 16,4 por ciento de los entrevistados, que creen que la de sus vecinos es mala o muy mala en un 39,8 por ciento.
Tras tales incoherencias, ¿cómo interpretar los resultados de la siguiente pregunta?: "Refiriéndonos ahora a la situación política general de España, ¿cómo la calificaría Ud.: muy buena, buena, regular, mala o muy mala?" He aquí los resultados: el 8,1 por ciento de los entrevistados considera que la situación política en España es buena o muy buena, frente al 54,4 por ciento que considera que la situación política española es mala o muy mala. Si la diferencia fuera la misma que en el caso anterior, cuando se les preguntó por la situación económica, el 54,4 por ciento que considera la situación política como mala o muy mala habría de bajarse al 31,0 por ciento.
El 39,8% de los españoles creen que la situación económica del país es mala o muy mala
Vayamos ahora a otras contradicciones. Pregunta: "¿Cuál es, a su juicio, el principal problema que existe actualmente en España? ¿Y el segundo? ¿Y el tercero?" Los problemas más citados son: El paro (citado por el 62,5 por ciento de los entrevistados) y tras el paro están "los políticos", citados por el 32,1 por ciento de los entrevistados.
Ahora bien, vayamos a la subjetividad. "¿Y cuál es el problema que a Ud., personalmente, le afecta más? ¿Y el segundo? ¿Y el tercero?" He aquí las respuestas: "Paro", citado por el 27,1 por ciento. "Políticos", citado por el 9,5 por ciento -desde luego menos que los problemas económicos (27,2 por ciento), la Sanidad (16,65 por ciento) o las pensiones (14,6 por ciento) .
Puestos a elegir, yo escogería como respuestas más fiables las subjetivas, es decir, las que se refieren a la situación personal del entrevistado, y no la opinión que éste tenga sobre la situación general, que siempre es vista vestida de negro.
En cualquier caso, hemos de suponer que el entrevistado conoce mejor su situación que la situación en la que vive el resto de los españoles y, desde luego, hay indicadores objetivos mucho más fiables que la opinión. Opinión de la que nacen todas las fake news que andan rondando por ahí.