
Chery da una de cal y otra de arena. El fabricante automovilístico chino abrirá un centro de investigación y desarrollo (I+D) en Cornellà de Llobregat (Barcelona), que se prevé que se ponga en marcha a partir de otoño. Así lo anunció este miércoles el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, desde China. En cambio, la firma retrasó de nuevo el inicio de la fabricación de sus modelos en la planta de Zona Franca de Barcelona.
El presidente ha afirmado que el centro tendrá unas instalaciones de 2.000 metros cuadrados que "ya están comprometidas" y ha remarcado que el acuerdo es fruto del trabajo de captación de Acció. Lo hizo tras reunirse con el presidente del grupo Chery, YinTongyue, en su sede central en Wuhu (China).
Las nuevas instalaciones se especializarán en el diseño y adecuación de los vehículos para atender las necesidades de los usuarios europeos, incluyendo la adaptación de las carrocerías (restyling), entre otros.
Chery llegó a Cataluña en abril de 2024, cuando hizo la presentación oficial del proyecto conjunto con EV Motors para fabricar coches en la antigua fábrica de Nissan en la Zona Franca de Barcelona. La firma del acuerdo implicaba, además de la producción de vehículos bajo la marca Ebro, el ensamblaje de automóviles de sus enseñas propias: el Omoda 5 y el Jaecoo 5.
No obstante, Chery ya retrasó el inicio de la producción de sus modelos de 2024 a otoño de 2025. Ahora, según avanza La Tribuna de la Automoción, lo hace de nuevo al primer trimestre de 2026 debido al retraso en la construcción de instalaciones necesarias para los nuevos modelos.
Chery alcanzó un volumen de ventas superior a los 2,6 millones de unidades en 2024 y también ha superado los 5 millones de unidades exportadas este año, además de operar en más de 80 mercados en todo el mundo mantenerse como la marca china que más vende en los mercados internacionales durante 22 años consecutivos.