Un número no cuantificado de conductores, muchos de los cuales eran poseedores de coches con más de veinte años de antigüedad, han estado pasando el examen de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) de manera fraudulenta hasta que, tras un desafortunado incidente relacionado con la seguridad vial, ha permitido a la Guardia Civil ponerle fin.
Esta trama delictiva acaba de ser destapada por la Guardia Civil en el marco de la operación Mojita, desarrollada en la provincia de Murcia. En ella, el organismo de seguridad ha detenido hasta el momento a once personas, entre las que se encuentra el director técnico de una estación, varios inspectores y personal administrativo de la estación investigada, así como responsables de talleres mecánicos y clientes habituales, y se les acusa de delitos de falsedad documental, contra la seguridad vial, pertenencia a grupo criminal y corrupción continuada entre particulares.
El coche comodín
De forma resumida, los vehículos afectados, de considerable antigüedad y con probabilidad de tener carencias técnicas, recibían la validación de la ITV sin cumplir los requisitos de seguridad exigidos. ¿Cómo? Según ha constatado la Guardia Civil, muchas de las pruebas, como la de los cinturones de seguridad o los neumáticos, eran pasadas en cuestión de segundos. Pero no solo eso.
Según cuentan en El Debate, para las pruebas más complicadas, como la de humos lo la de frenos, remplazaban el coche examinado por otro del que disponían en la estación técnica para falsear los resultados. En concreto, este coche comodín era un Renault Clio.
Un accidente destapó la trama
Todas estas irregularidades comenzaron a ser destapadas hace un año. Fue entonces cuando uno de los vehículos implicados sufrió un siniestro vial en la A-33, en el que un bebé de once meses falleció. Los especialistas de la Unidad de Investigación de Seguridad Vial (UNIS) de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, verificaron que se trataba de un siniestro ocasionado por las deficiencias técnicas que presentaba el vehículo, ya que el mismo tenía los neumáticos en mal estado y el origen del siniestro fue el reventón de uno de ellos y la posterior pérdida del control del automóvil.
Del mismo modo, los investigadores constataron que el vehículo había superado la ITV tan solo unas semanas antes, lo cual hizo sospechar a los agentes sobre el papel de la estación técnica.
Tras detener a once personas, los agentes continúan buscando a más vehículos cuya inspección haya sido manipulada.