Si alguna vez te has preguntado por qué existen varios colores para el líquido refrigerante, aquí te damos la respuesta. No solo es una cuestión estética, por lo que te explicamos cuál es el mejor tipo para tu vehículo, para que puedas elegir el adecuado y no tengas posibles problemas en el motor por haber escogido el equivocado.
Cuando hablamos del mantenimiento del coche, el líquido refrigerante es uno de los elementos más esenciales. Su función no solo es evitar el sobrecalentamiento del motor, sino también prevenir la corrosión de los componentes y ofrecer protección frente a temperaturas extremas. Sin embargo, no todos los refrigerantes son iguales y existen diferentes tipos que varían en composición, color y las propiedades de estos. En esta guía, aprenderás sobre los distintos tipos de líquidos refrigerantes, sus características, sus colores, y cómo elegir el más adecuado para tu vehículo.
Tipos de líquidos refrigerantes
Los líquidos refrigerantes se dividen principalmente en tres tipos: orgánicos (OAT), inorgánicos (IAT) e híbridos (HOAT). Cada uno tiene una composición y propiedades únicas. Los refrigerantes de tipo inorgánico (IAT) están basados en silicatos y fosfatos, por lo que son ideales para motores más antiguos, sin embargo, tienden a ser menos duraderos y requieren cambios más frecuentes. Por otro lado, los refrigerantes orgánicos (OAT) no contienen silicatos ni fosfatos, están diseñados para motores modernos y ofrecen una vida útil mayor. Finalmente, los híbridos (HOAT) combinan las mejores características de ambos, cuentan con buena resistencia a la corrosión, como los IAT, y una mayor durabilidad, como los OAT.
La evolución de los líquidos refrigerantes ha generado también una clasificación propia: G11, G12, G12+, G12++ y G13. El G11 es el más antiguo y el G13 el más moderno, cada uno con propiedades específicas para la protección y rendimiento cada motor. Esta clasificación es útil para saber qué líquido anticongelante comprar y cuáles pueden mezclarse sin perder propiedades. Si bien existen tablas de referencia para estas mezclas, siempre es recomendable consultar el manual del vehículo para asegurarse de cuál es el más adecuado. Además, según la concentración del refrigerante, el punto de congelación varía: una concentración del 10% soporta hasta -4ºC, mientras que una del 50% resiste temperaturas de hasta -37ºC.
Los colores del líquido refrigerante
Para diferenciar los tipos de refrigerante, los fabricantes utilizan pigmentos y los más habituales suelen ser de color azul, rosa, amarillo o verde. Aunque el color no define la composición exacta, sí ayuda a identificar el tipo y su compatibilidad con otros productos. Es importante recordar que no todos los colores pueden mezclarse entre sí. La composición química de cada refrigerante es distinta, y mezclar tipos incompatibles puede generar problemas graves en el sistema de refrigeración. Por eso, siempre es recomendable leer la etiqueta y evitar mezclas que no sean compatibles.
¿Cuál tengo que poner en mi coche?
Para elegir el líquido refrigerante adecuado, es esencial consultar el manual del vehículo, ya que allí se especifica el tipo recomendado por el fabricante. La mayoría de las gasolineras y tiendas especializadas ofrecen una variedad de refrigerantes, pero la elección debe basarse en la composición indicada en la etiqueta, que debe coincidir con las especificaciones recomendadas en el manual. Utilizar el refrigerante correcto evitará daños en el motor y garantizará una mayor eficiencia en el sistema de refrigeración.