
Rowan Atkinson, más conocido como Mr. Bean, siempre ha sido un apasionado de los coches. En concreto, de la competición. Y buena muestra de ello se puede ver en su garaje, donde guarda una colección de superdeportivos como un Aston Martin DB2, un Mercedes-Benz SLS AMG, un Jaguar Mark VII, un Aston Martin V8 Vantage Zagato o un Rolls-Royce Ghost. También el McLaren F1 con el que se estrelló en 2011 por una carretera al este de Inglaterra.
Sin embargo, su gusto por los coches de combustión no es el mismo que tiene por los eléctricos. Atkinson escribió un artículo para The Guardian en el cual describió a este tipo de vehículos como "sin alma" y no como la "panacea ambiental" que todos afirman que son.
El actor de Mr. Bean se compró un coche eléctrico, pero al poco tiempo reconoció sentirse engañado. "Nuestra luna de miel con los coches eléctricos está llegando a su fin", reveló Atkinson en ese momento. "Lamentablemente, conservar tu viejo coche de gasolina puede ser mejor que comprar un vehículo eléctrico", puntualizó.
Aún así, el cómico de 69 años reconoció que este tipo de vehículos eran "mecanismos maravillosos: rápidos, silenciosos y, hasta hace poco, muy económicos". "Compré mi primer híbrido hace 18 años y mi primer eléctrico hace nueve años y, a pesar de nuestra deficiente infraestructura de carga eléctrica, disfruté mucho de ambos.
Como era de esperar, el artículo de Atkinson recibió numerosas críticas por parte de la industria, quienes esgrimieron que los argumentos del actor británico eran engañosos, provocando debates sobre si los coches eléctricos son la mejor opción para reducir las emisiones.
Una de esas voces en contra del actor de Mr. Bean fue Green Alliance, un think tank centrado en un liderazgo ambicioso para el medio ambiente. El grupo aseguró que el artículo "dañino" de Atkinson estaba sesgando el discurso sobre los vehículos eléctricos, y no en el buen sentido.
"Desafortunadamente, las verificaciones de hechos nunca llegan a la misma audiencia que la afirmación falsa original, lo que enfatiza la necesidad de garantizar altos estándares editoriales en torno a la transición a cero emisiones netas", señaló Green Alliance en un comunicado.
Además, desde Green Alliance van más allá y aseguran que el periódico de derechas Daily Mail ha estado en una "campaña contra los vehículos eléctricos" y, aunque algunas de sus afirmaciones han sido una tergiversación, todavía "ha impactado a los consumidores y a los responsables políticos".
En el informe redactado por la Cámara Alta del Parlamento británico, llegaron a la conclusión de que "ante afirmaciones contradictorias y titulares alarmistas, los consumidores necesitan una fuente de información completa, clara y equilibrada para poder tomar decisiones informadas sobre sus vehículos".
Lenta implantación
El del Reino Unido es uno de los mercados principales de los coches eléctricos. Sin embargo, sigue siendo el único país importante (entre los europeos) que no ofrece incentivos para su compra, lo que dificulta que la gente se sume a ellos.
Aún así, el gobierno del Reino Unido anunció 112 millones de dólares en nuevas inversiones relacionadas con este tipo de vehículos, con el objetivo de convertir al país en líder en la carrera por adoptar vehículos eléctricos.
Todo esto son migajas para la Cámara de Londres, que criticó el mensaje de Sunak de retrasar la prohibición de las ventas de coches nuevos de gasolina hasta 2035 (anteriormente hasta 2030). "El gobierno debe hacer más para transmitir una visión positiva de la transición a los vehículos eléctricos", declararon desde la Cámara Alta.