Emilia Pardo Bazán, la escritora gallega fue la primera mujer española que condujo un coche allá por el año 1904. Sin embargo, no fue hasta 1925 cuando "oficialmente" una española, Catalina García González, aprobó el carnet de conducir.
Tras ello, la conducción entre mujeres empezó a cobrar importancia. Cifras que a día de hoy se sitúan en 11,9 millones de españolas con permiso de conducir de un total de 27,7 millones. Pese a ello, solamente 8,5 millones de mujeres aparecen como titulares del contrato del seguro de un vehículo a motor. Esto es el 30% de todos los turismos que hay en España, según los datos recabados por Unespa.
Es más, si se toman como referencia todas las tipologías de vehículos (motos, furgonetas, autobuses…), la cifra se reduce y las mujeres representan un 26% del total de los conductores habituales de vehículos a motor. Los turismos son los principales, según Unespa. Tras ellos, se sitúan los vehículos de dos ruedas. El 20% de ciclomotores y los escúteres del país son titularidad de mujeres, aunque es poco común que sean propietarias de motocicletas por su mayor peso.
En este sentido, la presencia femenina es particularmente baja en los vehículos pesados y de trabajo, ya que rara vez figuran mujeres como titulares del seguro de máquinas industriales, camiones o vehículos agrícolas.
Clave las conductoras sénior
Ahora bien, la relevancia de las mujeres entre el total de primeros conductores de vehículos es superior en la franja comprendida entre los 18 y los 40 años. En este tramo de edad, las mujeres representan en torno a un tercio de los titulares de vehículos del país. No obstante, el estudio revela una pérdida del interés gradual por los vehículos a motor.
Y es que, las tasas de primeras conductoras se situaban entre el 40% y 45% en la década de 2010. Es decir, 10 puntos porcentuales más que en la actualidad. Es más, la pérdida de interés por tener un vehículo a su nombre se percibe entre todos los jóvenes, independientemente del sexo. Esto se debe a la proliferación de alternativas de transporte público (bus, metro...), a la disponibilidad de taxis y vehículos de transporte con conductor (VTC), así como la oferta de coches de alquiler por minutos, los vehículos de movilidad personal (VMP) o las bicicletas, propias o de alquiler.
A pesar del cambio de tendencia entre las jóvenes, el número global de mujeres titulares de un vehículo va al alza en España. A cierre del pasado año, 8,4 millones de mujeres figuraban como titular de un seguro de automóvil en España, en comparación con 6,9 millones en 2010. Consecuencia del aumento de las conductoras sénior. En 2022, había en España más de un millón de conductoras de más de 65 años, mientras que, en 2010 eran la tercera parte, en torno a 336.000.