
Mercedes desvela el AMG GT, un cupé más amplio y deportivo, con la tecnología más avanzada para ofrecer máxima deporividad sin renunciar confort.
Llega la segunda generación del Mercedes AMG GT, un vehículo rediseñado desde cero, y que según la propia marca alemana es "muy AMG". La arquitectura del nuevo deportivo de AMG cuenta con su estructura de carrocería de aluminio compuesto, segura y rígida contra la torsión. Eso permite una nueva configuración de plazas tipo 2+2, lo que en un deportivo de esta clase significa mucho espacio para los ocupantes y para el equipaje.

AMG GT, pura tecnología
Componentes de alta tecnología como el tren de rodaje AMG Active Ride Control con estabilización semiactiva del balanceo, la dirección activa del eje trasero y la aerodinámica active subrayan sus argumentos para ser el nuevo buque insignia en la gama de automóviles deportivos y de altas prestaciones de la marca. Y es que sin duda este es uno de los mejores deportivos del mercado.
El objetivo de los responsables de la marca ha sido el de hacer un coche más utilizable y racional, pero sin renuncia a esa máxima deportividad que caracteriza a los modelos de AMG. Para ello ofrece ese habitáculo más espacioso Gracias a su configuración de tipo 2+2.

Pero al mismo tiempo es un gran deportivo. Lo es por su potente motor V8, pero también por su extrema rigidez, por sus suspensiones y por el sistema de tracción 4x4 desarrollado específicamente. Por AMG para este modelo.

También cuenta con un sistema de aerodinámica activa, incluyendo un alerón trasera activo con funcionamiento inteligente. E incluye el Paquete aerodinámico con deflectores de aire adicionales en el faldón delantero, spoiler en la parte trasera, difusor posterior aún más eficaz y alerón trasero rígido. Pero es un deportivo extremo.
Para ello equipa un motor V8 biturbo AMG de 4,0 litros con dos turbocompresores Twin-Scroll que proporciona 576 CV. Un motor asociado con un cambio de nueve marchas desarrollado por AMG de doble embrague. Y también incluye la función RACE START para una conseguir una aceleración óptima desde parado.
Disponible también con tracción integral
Otro aspecto clave es su sistema de tracción, el AMG Performance 4MATIC+. Se trata de un sistema de tracción total totalmente variable. Y por ello, por primera vez el AMG GT también está disponible con tracción integral.
Un embrague controlado electromecánicamente conecta de forma variable el eje trasero, de tracción permanente, con el eje delantero. El sistema calcula en todo momento la mejor distribución posible del par motor dependiendo de la situación, para que la marcha seleccionada y la distribución de la fuerza motriz también sean las más adecuadas. El rango va desde el 100% de potencia en el eje trasero hasta un reparto 50/50 en función de las circunstancias de la carretera.
Por otra parte, los Mercedes-AMG GT 63 4MATIC+ Coupé y GT 55 4MATIC+ Coupé equipan de serie el tren de rodaje AMG Active Ride Control con estabilización hidráulica y semiactiva del balanceo. El sistema permite un comportamiento óptimo en curvas y ciclos de carga, con características de conducción típicas de AMG en cuanto a dinamismo, precisión y respuesta para el conductor. Al mismo tiempo, aumenta el confort de marcha al conducir en línea recta y sobre baches.
Y para completar su equipamiento increíble, frenos cerámicos que aportan la mejor capacidad de frenado y lo que es más importante más capacidad de soportar el sobreesfierzo. Además, también incluye de serie el diferencial trasero de deslizamiento limitado. El sistema proporciona una tracción aún mejor a la salida de las curvas, con mayor. El conductor puede elegir entre los seis programas de conducción AMG Dynamic Select ("Smooth", "Comfort", "Sport", "Sport +", "Individual" y "RACE") permiten dotar al vehículo de un comportamiento variado, desde muy confortable a extremadamente dinámico.