El renacimiento de la marca española Ebro será una realidad desde finales de 2024 con las primeras unidades de su pick up eléctrica, y la hoja de ruta prevé alcanzar una producción de 50.000 vehículos anuales en 2027, repartidos en varios modelos.
Será en los terrenos de la Zona Franca de Barcelona que ocupaba Nissan y que se ha adjudicado el hub de descarbonización liderado por QEV y Btech, que tendrán a Ebro como uno de sus clientes.
El primer año, toda la producción de Ebro serán de su modelo pick up, que toma como base la estructura de la Nissan Navara, mientras que más adelante incluirá más modelos, como una furgoneta eléctrica de última milla basada en la eNV-200 de Nissan.
El proyecto, impulsado por las empresas Jaton Racing, Api Brothers, Btech (como desarrolladora de los vehículos) y Nexus Projectes, tiene como máximo accionista a EV Motors, que también prevé formar parte del hub.
Incluso el mediático Jesús Calleja ha tomado una participación minoritaria de Ebro, que no optó a las ayudas del primer Perte VEC, pero sí prevé acudir a la segunda convocatoria, según ha explicado a elEconomista.es el consejero delegado de Ebro, Pedro Calef.
En la presentación de la pick up en el Automobile Barcelona, el Salón Internacional del Automóvil, Calef ha destacado que el renacimiento de Ebro conserva la esencia histórica de la marca de fabricar "vehículos para trabajar", pero ahora eléctricos.
Su primer modelo tiene una potencia máxima equivalente a 300 caballos y una autonomía de 440 kilómetros con unas medidas "europeas" de 5,2 metros. Y es que en una primera fase se centrarán en vender en Europa, si bien tienen vocación global. Por ahora, ya están en contacto con clientes interesados de cinco países.
Ebro, la histórica marca de vehículos industriales y agrícolas desaparecida en 1987, producía precisamente desde sus inicios en 1967 en la planta de la Zona Franca que luego pasó a manos de Nissan, por lo que regresa a sus orígenes.
La pick up eléctrica de Ebro, todavía sin nombre, va destinada a uso profesional y para el sector industrial, si bien más adelante no descarta abrir mercado entre los particulares.
Calef ha explicado que la inversión estimada que acometerá Ebro se sitúa entre los 60 y los 70 millones de euros por modelo, al tiempo que ha subrayado que en la producción de los nuevos modelos de Ebro trabajarán, en el marco del 'hub', los exempleados de Nissan que no han encontrado una nueva ocupación, que son unos 1.200.