La automovilística japonesa Nissan cerró su ejercicio fiscal 2021 con unas ganancias de 215.533 millones de yenes (1.607 millones de euros), lo que supone dejar atrás las pérdidas de 448.700 millones de yenes (3.389 millones de euros) registradas en el ejercicio fiscal 2020.
Estas ganancias tendrán una contribución positiva a los ingresos netos del primer trimestre de Renault estimados en 49 millones de euros.
La compañía japonesa registró un beneficio operativo de 247.307 millones de yenes (1.841 millones de euros), mientras que en el ejercicio fiscal de 2020 la multinacional nipona tuvo unas pérdidas operativas por valor de 150.700 millones de yenes (1.138 millones de euros). Además, el margen operativo de Nissan volvió a ser positivo después de tres ejercicios fiscales, al situarse en el 2,9%, mientras que un año antes la rentabilidad se situó en el -1,9%.
Asimismo, la facturación de Nissan en el ejercicio fiscal 2021 se incrementó un 7,1% en tasa interanual, hasta los 8,42 billones de yenes. Todo ello gracias a la mejoría de la calidad de las ventas y a un cambio de divisa favorable.

Todo ello pese a que las ventas mundiales de Nissan se recortaron en un 4% en comparación con el ejercicio fiscal 2020, hasta las 3.876.000 unidades comercializadas.
La compañía reconoció que el entorno empresarial en el año fiscal 2021 siguió siendo "extremadamente desafiante", afectado por factores externos como la propagación prolongada del coronavirus, la escasez de suministro de semiconductores y los altos precios de las materias primas. A pesar de estos desafíos, Nissan ha seguido avanzando de manera constante con su plan de transformación Nissan NEXT al fortalecer su base comercial, mejorar la calidad de las ventas y lanzar nuevos modelos al mercado.
Previsiones
De cara al nuevo ejercicio fiscal, Nissan estima que el entorno de mercado sea "más severo" que el año fiscal 2021 debido a la escasez de semiconductores, el aumento de los precios de las materias primas y los costes logísticos, la crisis en Ucrania, así como el impacto de los cierres en el suministro de piezas en China.
No obstante, Nissan pretende mantener el beneficio operativo al mismo nivel que en el ejercicio fiscal 2021, asegurando el impulso de los productos, mejorando la calidad de las ventas y reforzando aún más la disciplina financiera y el control de los costes fijos.
Así, prevé tener unas ganancias de 150.000 millones de yenes (1.118 millones de euro), un beneficio operativo de 250.000 millones de yenes (1.863 millones de euros) y una facturación de 10 billones de yenes (74.569 millones de euros), lo que supondría un incremento del 18,7% en comparación con el ejercicio fiscal 2021.
Nissan produce menos de 20.000 coches en Barcelona
En la última campaña, Nissan también bajó la persiana a su fábrica de Barcelona. En diciembre salieron de manera oficial las últimas unidades de la planta catalana, ya con la producción bajo mínimos desde que en 2020 la automovilística hizo pública su marcha.
Según la información presentada al mercado, en el año fiscal 2021 se ensamblaron apenas 18.673 coches entre pick up Navara y furgonetas eNV200. La cifra va en línea con los 13.875 vehículos producidos en 2020, un ejercicio marcado por el cese de actividad por la pandemia y la posterior huelga de la plantilla.
Ahora, el Gobierno y la Generalitat buscan un nuevo inversor para los terrenos que ocupaba la automovilística nipona. Se los repartirán el hub de descarbonización que lideran Btech, QEV e Improva; Silence y un operador logístico todavía por determinar.