La tasa anual de producción industrial se situó en el -4,2% en diciembre, lo que supone la mayor caída desde diciembre de 2009. En términos mensuales, el descenso fue del 0,9%, encadenando dos descensos mensuales consecutivos.
Las cifras de producción industrial confirman la el frenazo económico que registró la economía de la zona euro a final de año. El PIB de la región cerró 2018 con un crecimiento del 1,8% en 2018 frente a la tasa de expansión del 2,4%, con un tasa interanual del cuarto trimestre del 1,2%.
El sector industrial refleja la presión a la que está sometida la región por la debilidad de la demanda exterior, en especial la industria del automóvil golpeada por la guerra comercial.
Por componentes, la mayor caída anual la ha registrado los bienes de equipo que descendió un 5,5%. Por su parte, los bienes de consumo duraderos retrocedieron un 4,4%, los de energía un 4,2%, un 4% los bienes intermedios y un 1,8% los bienes de consumo no duradero.
En términos mensuales, los bienes de equipo bajaron un 1,5%, al igual que los productos de consumo no duraderos. Los de energía cayeron un 0,4%. Por su parte, los bienes de consumo registraron un crecimiento del 0,7% y los bienes intermedios no registró cambios.
