
La Bolsa de Nueva York no ha podido hacer frente a la mayor tasa de paro registrada en EEUU desde hace 15 años y ha finalizado la sesión con fuertes pérdidas. El Dow Jones se ha precipitado un 1,64%, hasta los 8.599 puntos, mientras que el Nasdaq y el S&P se han dejado más de un 2%. es que razones no han faltado para ampliar las pérdidas en el último tramo de la sesión ya que EEUU destruyó 2,58 millones de empleos en todo 2008, lo que supone el peor dato desde el fin de la II Guerra Mundial en 1945. Más información en Ecotrader.
La Bolsa de Nueva York cerró con un descenso de algo más del 1% en el Dow Jones de Industriales, en una sesión en la que datos oficiales constataron que se acelera el deterioro del mercado laboral en Estados Unidos.
En concreto, el índice Dow Jones (DJI.NY), que agrupa a algunas de las mayores empresas estadounidenses, restó durante la sesión 143 puntos y acabó en 8.599,02 unidades, lo que supone un 1,64% menos.
Por su parte, el índice Nasdaq (NDX100.NQ)se dejó un 2,81%, hasta los 1.571,59 puntos después de restar 45,42 unidades, y el selectivo S&P 500 (SP500.CH) perdió un 2,13%, hasta los 890,35 puntos.
Una tasa de paro disparada
Los inversores de Wall Street recibieron con cierto alivio los datos oficiales de empleo y desempleo en diciembre pues, aunque mostraron una fuerte erosión del mercado laboral a finales de 2008, fueron algo menos desfavorables de lo que algunos economistas esperaban.
La economía de Estados Unidos perdió 524.000 ocupaciones el mes pasado respecto de noviembre, cuando ya desaparecieron 584.000 empleos. Esa última cifra la revisó hoy el Gobierno y la elevó en 51.000 empleos respecto de calculado con anterioridad.
La tasa de paro subió en diciembre cuatro décimas respecto del mes anterior, hasta el 7,2%, lo que representa el nivel más alto en 16 años. Durante 2008 se perdieron 2,6 millones de empleos, lo que supone el mayor descenso anual desde 1945.
Situación económica "atroz"
"Está claro que la situación económica es atroz, se está deteriorando y requiere medidas inmediatas y urgentes", manifestó hoy el presidente electo Barack Obama, que recordó además que otros 3,4 millones de estadounidenses solo tienen empleo a tiempo parcial.
El mercado esperaba ya cifras muy desfavorables, después de que la empresa privada de análisis Automatic Data Processing (ADP) informara el miércoles de una perdida de 693.000 empleos en el sector privado en diciembre.
Ese día el índice Dow Jones bajó un 2,7%, el mayor descenso en un mes, pero dejó la impresión de que el mercado estaba dispuesto a encajar con aplomo datos como ese y otros que mostraron después una fuerte caída de las ventas minoristas en diciembre, el mes más importante para las cuentas anuales de ese sector.
Algunos analistas atribuyen la aparente estabilidad de Wall Street a un volumen de negocio aún inferior a lo habitual, así como a la cautela de los inversores hasta que se produzca el relevo en la Casa Blanca y se conozcan detalles concretos del plan de estímulo económico que quiere poner en marcha el nuevo Gobierno.
Citigroup, el peor parado
El banco Citigroup (C.NY)encabezó los descensos en el índice Dow Jones de Industriales, con una depreciación del 5,7% en sus acciones, en una jornada en la que se conoció que Robert Rubin, antiguo secretario del Tesoro, presentó hoy su dimisión como asesor y miembro del Consejo de Administración en esa entidad.
Las acciones de American Express, (AXP.NY) Bank of America (BAC.NY) y JPMorgan, además del fabricante de aluminio Alcoa (AA.NY), registraron descensos de alrededor del 4% y fueron, junto a Citigroup, las que tuvieron un final de semana más negativo en ese índice.
Las petroleras Exxon Mobil (XOM.NY)y Chevron (CVX.NY) finalizaron la sesión con un descenso de casi un 2% en el valor de sus acciones, en una jornada en la que el barril de crudo de Texas bajó un 2,1% y cerró en 40,83 dólares en el mercado neoyorquino de materias primas.
Los títulos del fabricante aeronáutico Boeing (BA.NY)bajaron un 0,76% después que se conociera que recortará este año 4.500 empleos en su división de aviones comerciales.
El dólar se debilitó ante el euro y el yen y los bonos de la deuda pública a diez años subieron de precio, con lo que su rentabilidad se situaba en el 2,39%.