
La firma, que lleva dos años batiendo al sector, ostenta su peor consejo en 12 meses
Desde que arrancó 2017 Cellnex ha sido el valor con mejor comportamiento entre las mayores telecos europeas, con una rentabilidad acumulada del 60 por ciento, al calor de los rumores de opa y lucía una de las mejores recomendaciones de compra de la industria. La firma de torres de comunicación se encuentra inmersa en una nueva estrategia para combinar el crecimiento orgánico con los nuevos contratos ganados, como demuestra el reciente acuerdo con Bouygues para construir nuevas oficinas que desempeñarán un papel clave en el desarrollo futuro de las redes 5G.
Sin embargo, las estimaciones de beneficio de Cellnex tras presentar sus cuentas han venido acompañadas de un deterioro en la recomendación que emitían los analistas del consenso que recoge FactSet, que han pasado de aconsejar adquirir sus títulos a mantenerlos un año después. Y es que si en 2017 ganó 33 millones de euros, para 2018 la perspectiva es que pierda 2 millones. No será hasta 2019 cuando cambie las pérdidas por ganancias y registre un beneficio de 71 millones.
Entre los bancos de inversión que se han mostrado más excépticos con el futuro a medio plazo de Cellnex se encuentra Barclays, que rebajó en diciembre el consejo sobre el valor desde sobreponderar hasta neutral y redujo el precio objetivo de 27 a 26 euros, el mayor ajuste entre las casas de análisis que han revisado su valoración el último mes. Para el banco británico, el crecimiento inorgánico de Cellnex es el principal riesgo para su calificación, y si bien les sigue gustando por el crecimiento estructural que ofrece, se muestran más cautos con la oportunidad de acuerdos significativos en el corto plazo. "Creemos que las expectativas de consenso de ebitda de Bloomberg para 2019 se han vuelto demasiado optimistas. Estamos un 3,5 por ciento por debajo de esa previsión".
Desde Bankinter consideran que "la cuenta de resultados sigue mostrando buenas tendencias en la parte alta (ingresos y ebitda), pero el elevado endeudamiento provoca que registre pérdidas de 26 millones en los nueve primeros meses de 2018. Todo ello, se une a nuevas operaciones corporativas que se ejecutan por debajo del precio de cotización de la acción".
Más optimistas se muestran en Renta 4, que la incluye en su cartera de valores favoritos: "A nivel fundamental seguimos viendo gran valor en la compañía de cara al largo plazo que, además, tras el cambio en su accionariado, cuenta con el respaldo público de sus principales accionistas ante el fuerte desarrollo mediante adquisiciones que están llevando a cabo".