
Las acciones de Tesla se dispararon un 17,35% en los primeros compases de Wall Street después de que Elon Musk, fundador de la firma, y el regulador bursátil de EEUU (SEC) hayan llegado a un acuerdo que permite a Musk mantener su posición como CEO de la firma. Además, la automovilística ha cumplido con los objetivos de producción y entregas del Model 3 en el tercer trimestre del año.
Musk ha aceptado un acuerdo con la SEC -que lo investiga por fraude tras anunciar en Twitter una exlusión de la bolsa de la compañía que nunca se produjo- bajo el cual sí se verá obligado a dejar la presidencia de la junta directiva (durante al menos tres años) y a pagar una multa de 40 millones de dólares a cambio de la retirada de los cargos presentados. Aún así podrá conservar su puesto como CEO o consejero delegado. El propio Musk ha asegurado que seguirá tomando decisiones estratégicos en la firma.
El rebote de la jornada empieza a borrar las pérdidas del pasado viernes, cuando se conoció la denuncia del SEC. Esa jornada, Tesla cayó un 13,9% hasta los 307,52 dólares por acción, mientras que la subida de hoy está permitiendo que los títulos de la firma se coloquen por encima de los 306 dólares.
La intrahistoria
"Estoy considerando privatizar Tesla a 420 dólares. Financiación asegurada" rezaba el tuit de la discordia que provocó que los títulos de la compañía llegaran a subir un 11% mientras el mercado se rascaba la cabeza intentando dilucidar su contenido.
Es por ello que las alarmas no tardaron en sonar. Mientras algunos analistas descifraban que una compra apalancada valdría aproximadamente 72.000 millones de dólares y formulaban escenarios sobre cómo costear la operación, la Comisión de Mercados y Valores de EEUU (SEC, por sus siglas en inglés) llamaba a la puerta de la de Palo Alto, California, para determinar la veracidad del contenido de su tuit.
Pocos días después, el propio Musk anunció que esta operación no sería posible. En un comunicado emitido a finales de agosto, Musk intentaba dar explicaciones de lo ocurrido con el objetivo de evitar la acusación de la SEC: "Aunque la mayoría de los accionistas con los que hablé dijeron que permanecerían con Tesla si salíamos de la bolsa, el sentimiento, en pocas palabras, era 'por favor no hagas esto'", indicó Musk en el comunicado.
El fundador de Tesla ha asegurado que tomó la decisión de no excluir a Tesla de bolsa basándose en los comentarios de los accionistas, incluidos los inversores institucionales, que argumentaron que tienen reglas internas que limitan cuánto pueden invertir en una empresa privada. Aunque Musk reculó, la SEC ya había emprendido la investigación que ha terminado con este acuerdo.