El jueves llega la primera reunión de otoño del Banco Central Europeo (BCE), y como prometió Mario Draghi en julio, en esta estación es cuando el mundo tendrá detalles sobre cómo va a terminar el programa de compras de deuda que mantiene vigente la entidad desde 2015.
Es más, en septiembre el economista italiano ya apuntó directamente a este evento como el momento en el que publicará datos concretos sobre los cambios que va a vivir el programa de compras de bonos en la eurozona y ahora, en la semana crítica, los expertos encuestados por Bloomberg dan su opinión sobre qué es lo que va a decir Draghi el próximo jueves.
El consenso de 57 analistas que han participado en el sondeo espera que, efectivamente, el BCE confirme los cambios que habrá a partir de enero en el QE. En concreto, la media de encuestados espera que se reduzcan las compras hasta la mitad -como ya se filtró hace dos semanas a Bloomberg-, con lo que las adquisiciones continuarían a partir de enero de 2018 a un ritmo de 30.000 millones de euros todos los meses, y que, según la mediana que recoge la encuesta, se alargaría durante nueve meses, hasta septiembre de 2018.
Sería entonces cuando el programa terminaría, opinan los expertos, quienes también creen que Draghi no tendrá que cambiar la normativa del QE para poder seguir comprando deuda, ante el peligro de que la entidad se quede sin deuda disponible que comprar de algunos países, como es el caso de Alemania. Los encuestados consideran que Draghi aún tendrá un margen de 300.000 millones de euros antes de toparse con ese problema.
Subida de tipos en 2019
Además de lanzar sus estimaciones para el futuro del programa de compras, los encuestados también han dado su opinión respecto al momento en el que la entidad subirá los tipos de interés en la eurozona. Por primera vez desde que se realizan estas encuestas, se señala un momento concreto: el segundo trimestre de 2019. Hasta ahora, la fórmula era aún menos concreta, ya que los expertos consideraban que la entidad subiría tipos en algún momento "después del primer trimestre de 2019".
Eso sí, hay que matizar que, según la encuesta, la primera subida de tipos que se producirá en la eurozona será en la facilidad de depósito -el dinero que cobra el BCE a los bancos por aparcar su dinero en la entidad-, y no en los de referencia: el tipo de depósito se aumentará en el primer trimestre de 2019, y en el siguiente le llegará el turno a los tipos de refinanciación, la referencia clave en Europa.
Los expertos hablan
Uno de los factores más importantes para la entidad, en este momento delicado, es ser capaz de desmantelar el programa sin dar sustos a los mercados. Desde Nomura, quienes creen que reducirá el QE en 20.000 millones al mes, desde enero hasta junio de 2019, y en otros 20.000 millones desde junio hasta septiembre, cuando terminará el programa, destacan que "prevenir una respuesta aguda de los mercados que endurecería las condiciones financieras en la eurozona, además de desestabilizar la actividad económica, es una clara prioridad para el BCE".
Para ING, sin embargo, el escenario más probable para este jueves es que la entidad "reduzca las compras hasta los 25.000 millones de euros, y extienda la duración hasta el final de 2018", destaca el banco holandés, añadiendo que Mario Draghi "dejará un recordatorio claro de que la primera subida de tipos no llegará hasta mucho dspués del final del QE, lo que debería ayudar a anclar las expectativas de tipos de interés".
Por su parte, desde Ebury creen que Draghi será aún más cauto, y "anunciará una reducción de 20.000 millones de euros, o incluso menos, prolongando el QE durante al menos nueve meses".