
British American Tobacco, propietaria de marcas como Lucky Strike, es la tercera mayor tabacalera del mundo por capitalización -115.000 millones de dólares-, sólo por detrás de Phillip Morris y su spin-off en Estados Unidos, Altria, y es la primera del sector que ha conseguido entrar en el Eco30 desde que lo hiciera Japan Tobacco en el segundo semestre de 2014.
La compañía anglo-americana -es resultado de la fusión entre la británica Imperial Tobacco con la estadounidense American Tobacco- ha comenzado el año 2017 como terminó el anterior: con un impulso en bolsa que, de hecho, ha llevado a sus títulos a tocar máximos históricos el pasado 1 de marzo, al situarse en las 51,6 libras.
La tabacalera tuvo en el Brexit y en Donald Trump dos puntos de inflexión claves durante 2016. En la semana posterior al referéndum británico sus acciones se revalorizaron más de un 13% en el parqué londinense debido, sobre todo, a su condición de compañía exportadora, por lo que la brutal depreciación de la libra frente a sus principales cruces (el euro y el dólar) ha abaratado considerablemente su producto.
Por otro lado, la llegada a la Presidencia de Estados Unidos del magnate norteamericano no fue bien recibida por la compañía en un primer momento, cediendo más de un 6% en las dos sesiones posteriores. Sin embargo, las intenciones inflacionistas (a través de inversión pública) así como un eventual recorte en la fiscalidad de las empresas, ha sido celebrado por la tabacalera, que desde entonces rebota cerca de un 20% en el parqué.
Gana más que nunca en libras
El pasado 23 de febrero presentó sus últimos resultados anuales, los correspondientes al ejercicio 2016. Pese a ser una multinacional que vende en todo el mundo, sigue teniendo su sede en Reino Unido, por lo que sus cuentas están denominadas en libras. La debilidad de esta divisa le ha permitido alcanzar su mayor cifra de beneficio de la historia, con 4.650 millones de libras (5.690 millones de euros), un 8,3% más respecto a 2015.
El banco de inversión Citi, que recomienda comprar los títulos de la compañía, quedó "impresionado" con sus cuentas. Además, destaca otros grandes atractivos como "la capacidad de generación de caja y la rentabilidad que ofrece su dividendo [3,68% para 2017 según las estimaciones del consenso recogido por FactSet] en un momento en el que existe una incertidumbre considerable".
El mercado espera que continúe incrementando su beneficio hasta superar los 6.000 millones de libras en 2019, es decir, un aumento del 30% en el trienio.