
Una de las principales particularidades de los dividendos estadounidenses es la antelación que se necesita a la hora de tener los títulos en cartera para poder cobrar la remuneración. Normalmente, se requiere un mes, aunque en algunas compañías se precisan al menos dos meses. En este sentido, esta es la última semana en la que se puede optar a los pagos de Coca-Cola y Wal-Mart.
Esta semana hay dos días importantes a marcar en el calendario si es de los que les gusta 'cazar' los dividendos de las compañías. Y es que en las próximas jornadas la oportunidad para comprar las acciones de Wal-Mart y Coca-Cola y cobrar así su remuneración se acaba.
Mañana será la última llamada de la cadena de grandes almacenes. Aunque su pago no llegará hasta el próximo 3 de abril, los títulos han de tenerse en cartera como muy tarde hasta el 7 de marzo. El grupo repartirá el primero de los cuatro pagos que suele hacer al año y que ascenderá a 0,51 dólares por acción. Una cantidad que ofrece una rentabilidad del 0,7% y que supone un incremento del 2% respecto al año pasado. En total, en 2017 pagará 2,04 dólares que suponen un interés anual cercano al 3%.
En el caso de Coca-Cola la última puerta de entrada a su dividendo será el viernes, ya que el 13 de marzo las acciones empezarán a cotizar sin el derecho a cobrar la remuneración. Al igual que Wal-Mart, ha elegido el 3 de abril para distribuir 0,37 dólares por acción, siendo el rendimiento del 0,9%. También suele realizar cuatro entregas al año y, este ejercicio, según las previsiones el dividendo total será de 1,48 dólares, un 5,7% más que el año anterior y que implican una rentabilidad del 3,5%.
Dividendos 'reales'
Tanto Wal-Mart como Coca-Cola forman parte de la 'realeza del dividendo' en Estados Unidos, ya que ambas compañías forman parte del S&P 500 Dividends Aristocrats, un selectivo que recoge a aquellas empresas estadounidenses que durante 25 años consecutivos han incrementado su pago al accionista.
De hecho, la cadena de grandes almacenes mejorará el dividendo que ofrece a sus accionistas a pesar de que se espera una caída en el beneficio de su año fiscal 2018 superior al 4%. Diferente es la situación de Coca-Cola, para la que se prevé una mejora del 23,7%.