
Tokio, 20 oct (EFE).- Iberia y el propio grupo IAG, al que pertenece, tendrán que estudiar en algún momento la forma de competir con los vuelos de largo recorrido que están empezando a operar algunas compañías de bajo coste, ha reconocido hoy su presidente ejecutivo, Luis Gallego.
Hay un fenómeno de bajo coste, que de la misma manera que hace años parecía una simple amenaza que se quedaría en nada en el segmento de corto y medio recorrido y a día de hoy por ejemplo en España tiene más de un 50 % del mercado, está empezando a operar en el largo recorrido, ha explicado.
Aunque no hay en este ámbito tantas ventajas en la utilización del avión como en el de vuelos cortos, porque el coste del combustible es superior y de alguna forma el ahorro se diluye más, "pero es verdad que existen modelos que están empezando a funcionar" como por ejemplo Norwegian, que volará desde Barcelona a varias ciudades de EEUU, ha admitido.
El propio grupo IAG e IBERIA (IBLA.MC)siempre han tenido presentes todos estos movimientos que se están produciendo en la industria, lo que muestra el lanzamiento en 2006 por parte de la compañía española de la bajo coste Clickair, que luego se fusionó con Vueling, y posteriormente Iberia Express.
Según Gallego, "en algún momento veremos cuál es la mejor forma de competir con este fenómeno, aunque entiendo que probablemente no llegue a las cuotas de mercado que tienen las 'low cost' en el corto y medio recorrido".
Tener una empresa como Iberia Express que puede competir con easyJet o Norwegian en vuelos punto a punto en el mercado balear o canario y al mismo tiempo ayudar a alimentar el hub (centro de interconexiones) de Madrid es "una herramienta muy útil", ha agregado.
Por otro lado, para hacer frente a la bajada de los ingresos que afecta a las compañías que operan en Latinoamérica debido a un exceso de capacidad generado por la bajada de los precios del petróleo, Iberia ha decidido incorporar una nueva clase intermedia entre "business" y turista.
La nueva clase turista "premium", que empezará a estar disponible a partir de la próxima temporada de verano de 2017, ayudará a captar a clientes dispuestos a pagar un poco más a cambio de mayor confort en sus viajes, ha destacado.
Iberia será la única aerolínea que ofrecerá esta clase en vuelos directos entre España y Latinoamérica, lo que reforzará su liderazgo en estas rutas.
En el último año, prácticamente todas las compañías han reducido sus ingresos medios entre un 5 % y un 20 %, dependiendo del mercado, y se está viendo en general que la ventaja que supone la bajada del precio del petróleo "se está de alguna forma diluyendo" por la reducción de los precios, ha advertido.
Además de medidas como el lanzamiento de la nueva clase turista premium, para acceder a un segmento de mercado al que hasta ahora Iberia no atendía, no habrá nuevos recortes de capacidad, aunque tampoco aperturas de más rutas en el corto plazo después de la de Tokio.
La ruta a Japón se ha iniciado con tres frecuencias semanales, pero Gallego está seguro de que "va a haber demanda suficiente", para poder llegar en el futuro a un servicio diario, lo que dependerá de la evolución del ingreso medio, y a partir de ahí "podemos incluso considerar si tiene sentido operarla con un avión de calibre más grande también por la cantidad de carga".
Otro ámbito donde Iberia busca mejorar su rendimiento es dentro del plan estratégico de mantenimiento en el que trabaja el grupo IAG y cuya primera fase de análisis finalizará en noviembre, y que puede suponer una oportunidad para la aerolínea española, al jugar con ciertas ventajas.
Entre ellas, Gallego se ha referido a la posibilidad de captar cargas de trabajo del grupo y terceros por la cercanía de las instalaciones y salarios del sur de Europa, lo que supone unos costes unitarios más atractivos y una ventaja a la hora de competir.
No obstante, también el Reino Unido tiene ahora la ventaja de que los costes laborales han bajado por la depreciación de la libra, ha apuntado.
Gallego ha reconocido que está esperando las conclusiones de este plan para ver el impacto que pueda tener en el área de Mantenimiento y poder intensificar, así, las negociaciones del nuevo ERE voluntario que aplicará Iberia.