Aunque el trimestre natural que acaba de cerrarse es el segundo, algunas firmas llevan un año fiscal distinto. Es el caso de Ryanair que acaba de cerrar los primeros tres meses de su ejercicio. La aerolínea está de enhorabuena ya que, pese a todos los inconvenientes a los que está haciendo frente el sector, el consenso cree que habría vivido su mejor primer trimestre de la historia.
El consenso de mercado que recoge Bloomberg es optimista con el primer trimestre fiscal de la irlandesa ya que espera que obtenga los mejores resultados de su historia para este periodo, algo que se verá confirmado el próximo lunes, aunque todavía sin hora prevista.
Y es que, los expertos consideran que la aerolínea logrará unas ganancias de 260,2 millones de euros. De cumplirse la previsión, la firma no sólo obtendría el mayor beneficio de un primer trimestre, sino que conseguiría incrementarlo un 6,16% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Mejor parado saldría su beneficio por acción ya que, en este caso, los expertos estiman que el incremento frente a un año antes superará el 20,5%. En concreto, las previsiones apuntan a una ganancia por título de 0,217 euros, frente a los 0,18 obtenido en su primer trimestre fiscal del pasado curso.
Por último, su cifra de negocio también sería la más elevada para este periodo del año. Las previsiones apuntan a unas ventas de 1.695 millones de euros, lo que significaría un incremento de sus ingresos con respecto al ejercicio anterior, cuando alcanzó los 1.653 millones, del 2,54%.
El incremento de los precios del crudo desde sus mínimos por debajo de los 30 dólares, el terrorismo internacional que ya ha golpeado en distintas ocasiones a Europa, así como la salida de Reino Unido de la Unión Europea son los frentes a los que las aerolíneas están teniendo que hacer frente este ejercicio. Con respecto a este último, JP Morgan ya rebajó el precio objetivo a distintas de ellas ya que, según consideran, con el nuevo escenario en el Viejo Continente, "existe la necesidad de nuevos acuerdos bilaterales entre las aerolíneas". Es por ello que a Ryanair le redujo un 10% su valoración justa en bolsa, de 16,50 euros a 15 euros.
Aun así, el banco estadounidense es más optimista que la media de las firmas que siguen a la compañía ya que sitúan su precio objetivo en los 14,72 euros. Con dicha valoración, el potencial alcista a doce meses vista estimado es del 33,5%, lo que le permitiría recuperar todas las caídas que experimenta desde que dio inicio el año y que arroja unos números rojos del 26,48%.
Además, la firma cuenta con una sólida recomendación de compra avalada por el 80% de los analistas que la siguen. mientras que sólo una firma de inversión, HSBC, considera que lo más oportuno es deshacerse de sus títulos, un consejo que mantiene desde el pasado mes de febrero.
