Bolsa, mercados y cotizaciones

Los hedge funds quieren anticiparse al BCE y sacar tajada con la deuda a largo plazo

  • La escasez de bonos a corto plazo podría obligar al BCE a mirar el largo
  • Buscan un 'seguro' por si la Eurozona se atasca en una década de deflación
Foto de Reuters

Los hedge funds o fondos de cobertura parecen haber encontrado una oportunidad para hacer más dinero con el programa de compra de bonos del Banco Central Europeo, por lo que están adquiriendo deuda a largo plazo anticipándose a los beneficios que podrían obtener vendiéndosela después al BCE.

Según datos de Bank of America Merrill Lynch (BAML), desde 2014 los hedge funds han duplicado prácticamente sus posiciones en bonos de la zona euro con vencimientos de más de 15 años, en previsión de que el BCE centre sus compras en este segmento de vencimiento en los próximos meses.

El vencimiento medio actual de las recompras del BCE es de alrededor de ocho años, muy inferior al promedio de 12 años del conjunto de los activos elegibles. Esto sugiere que el BCE (que no tiene marcados objetivos según perfil de vencimiento) hasta ahora había comprado solo deuda a medio y corto plazo.

"Los hedge funds están comprando bonos a largo plazo... hasta que el BCE les libre finalmente de ellos", explica el estratega de BAML, Ralf Preusser. Los analistas han buscado oportunidades potencialmente rentables dentro del programa del BCE desde sus inicios, pero a falta de menos de un año para que termine, la llegada de estos fondos sugiere que otro grupo de activos se unirán a la fiesta.

Los hedge funds, que suelen invertir con fuerte apalancamiento, son a menudo los primeros en vender si los mercados van en su contra, amplificando las fluctuaciones de precios en unos mercados de bonos donde la liquidez se ha vuelto escasa. Algunos analistas dijeron que la presencia del BCE como gran comprador podría moderar esta estrategia y las fluctuaciones.

Los datos de BAML muestran que en 2016 los hedge funds han asignado de media un 15% de los bonos de largo vencimiento de la zona euro vía sindicación, casi el doble que el 8% de media de hace dos años. Esto ha ocurrido en parte por la búsqueda de rentabilidad, mientras que la escasez de bonos a corto plazo ha reforzado la idea de que el BCE tendrá que comprar deuda de largo plazo.

Los analistas estiman que unos 500.000 millones de euros en bonos de la Eurozona con vencimientos que van entre los dos y 30 años tienen rendimientos más bajos que el tipo de depósito del BCE, lo que los convierte en no aptos para ser incluidos en su programa de expansión cuantitativa (QE).

Preusser de BAML cree que los bancos centrales de Alemania y Holanda, que se han inclinado hacia la compra de bonos de más corto plazo, ahora están ahora adquiriendo bonos a largo plazo en nombre del BCE.

Beneficios a corto plazo

Algunos pronósticos indican que el BCE podría tener que llegar a comprar bonos más allá de su límite fijado en 30 años si la inflación y el crecimiento no despegan y tiene que ampliar su programa de compras. Cualquier incremento de los plazos de las compras podría también reducir el rendimiento de los bonos que están fuera del programa del BCE.

Estimaciones bancarias muestran que los gobiernos de la Eurozona vendieron alrededor de 30.000 millones de euros en bonos a 50 años entre 2006 y 2015. Sólo este año se han vendido 9.000 millones de euros y se espera que Italia también coloque deuda así en la segunda mitad de este ejercicio.

Un desglose de las ventas recientes de bonos a 50 años en Francia y España muestra que los fondos de cobertura adquirieron el 13% de las emisiones de cada país y el 17% en una subasta similar en Bélgica en abril, convirtiéndoles en uno de los mayores inversores en deuda de muy largo plazo.

Un banquero afincado en Londres que recientemente organizó subastas de deuda de largo plazo para gobiernos de la eurozona, dijo que este año se había producido un repunte en las consultas de los hedge funds sobre deuda de muy largo plazo.

Este dijo bajo condición de anonimato que los fondos, principalmente de Reino Unido y Estados Unidos, llaman de forma rutinaria para pedir opiniones sobre las intenciones del BCE, intentar testar cuando comenzará a comprar bonos de vencimiento más largo.

"Están comprando para obtener beneficios a corto plazo en un horizonte de tres a seis meses", asegura el banquero. Este dinero especulativo se suma a la demanda tradicional por este tipo de bonos de largo plazo por parte de fondos de pensiones y aseguradoras, y de otros inversores que buscan un seguro contra la perspectiva de que la zona euro entre en una década de deflación al estilo de Japón.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky