
Tras perder otro 1% en la última media sesión del año, el Ibex 35 arranca 2016 en los 9.544,2 puntos y como el selectivo más rezagado de Europa, después de haber saldado su peor ejercicio desde el año 2011 y tras romper, con ello, racha de ganancias, ya que los dos ejercicios anteriores había cerrado en positivo.
Y eso a pesar de que todo apuntaba a que sería un buen año para la bolsa. No obstante, a los problemas del resto de Europa, como el desenlace de la crisis griega o el temor a una ralentización de China, se unió el freno de los mercados de Latinoamérica, región de la que dependen muchas compañías españolas.
De cara a 2016, el principal foco de incertidumbre para la renta variable durante el primer trimestre será político. Y es que las últimas elecciones han abierto multitud de escenarios ante la incapacidad de formar Gobierno.