
El índice general de la bolsa de Shanghái, el principal indicador de los parqués chinos, cerró hoy con pérdidas del 5,77% (225,85 puntos), hasta los 3.686,92 enteros, con lo que completó su tercera semana de hundimiento, después de haber pasado siete meses al alza. Las autoridades chinas aseguraron esta semana que iban a investigar posibles manipulaciones en los mercados.
El parqué shanghainés, que cerró así la semana con unas pérdidas totales de un 12,29%, ya abrió esta mañana un 3,04% a la baja y llegó a aumentar hasta cerca del 6% durante la mañana, aunque luego se recuperó parcialmente para volver a empeorar a última hora.
Esta es la tercera semana de fuertes caídas en las bolsas chinas, entre una gran volatilidad, debida a sus millones de inversores individuales que han volcado sus ahorros en el mercado de valores a pesar de tener muy rudimentarios o inexistentes conocimientos financieros.
Límite a las OPV
Las salidas a bolsa en los mercados chinos se van a limitar durante el comienzo de este mes ante la fuerte caída de las cotizaciones, anunció hoy la Comisión Reguladora de Valores de China. El regulador decidió limitar a diez las salidas a bolsa para el primer tramo de este mes, después de que en todo el mes de mayo hubo 45 y en junio un total de 47. Este importante número de salidas ha hecho temer a las autoridades que pueda haber un exceso de operaciones de este tipo.
La Comisión Reguladora de Valores también señaló hoy que intentará llevar hacia las bolsas a más fondos que invierten a largo plazo, a fin de generar más estabilidad. Por ejemplo, el pasado lunes se anunció un borrador oficial que prevé dar a los fondos de pensiones la autorización para invertir en las bolsas.