
El mercado esperaba expectante las palabras de Mario Draghi. Aunque el presidente del Banco Central Europeo (BCE) no anunció cambios en los tipos de interés, dejó la puerta entreabierta a aplicar estímulos no convencionales para la economía europea. Un discurso que agitó a las principales plazas del Viejo Continente y provocó que la jornada terminase siendo festiva, con la mayoría de ellas en niveles máximos del año.
Los inversores se cargaron de optimismo con la renta variable española, un hecho que impulsó al Ibex 35 hasta los 10.584,1 puntos, tras repuntar un 1,42% en la sesión y convertirse en el más alcista de Europa. Esta subida le llevó a romper no solo su techo más alto del año, sino un nivel que no veía desde 2011.
Atrás quedan los 10.525 puntos en los que el índice español se fijaba en los últimos meses, para poner la vista más allá. La próxima meta: los 11.000 puntos. En torno a este nivel es donde los expertos de Ecotrader sitúan ahora la resistencia del Ibex y de la cual se queda a un 3,9%.
Para el consenso de bancos de inversión el índice en estos momentos está sobrevalorado, ya que teniendo en cuenta los precios objetivos de las 35 compañías del selectivo español y su ponderación en él, el Ibex 35 estaría un 3,44% por encima de su precio justo -los 10.219,7 puntos-.
Pero ante la euforia de los máximos anuales, no hay que olvidar que la bolsa española se enfrenta a otro hándicap, una mejora en las estimaciones de beneficios que no termina de llegar. Además, continúa siendo la más cara por PER -número de veces que el beneficio se recoge en el precio de la acción- al cotizar en las 16,31 veces, el nivel más alto desde las puntocom.
La banca tira del carro
Si en la jornada hubo un sector destacado, fue el bancario. Seis de los siete bancos cotizados dirigieron la subida del Ibex. Con un ascenso del 4,11%, Bankinter fue el líder de la sesión seguido de Popular, que repuntó un 3,94%. Ambos alcanzaron su precio de cotización más alto del ejercicio, en el caso del primero se remonta a 2008 y en el segundo a 2012.
Junto a ellos, otros cinco valores tocaron su techo anual, Indra, ACS, Santander, Enagás y Ferrovial. En el caso de las dos últimas compañías fue todo un hito, ya que sus máximos fueron históricos -en 22,33 y 15,91 euros-, respectivamente. La tercera en el podio de subidas fue BBVA, con un ascenso del 3,61%. La entidad financiera que preside Francisco González llegó hasta los 9,22 euros por acción, un nivel a vigilar tras romper la resistencia de los 9,15 que los expertos de Ecotrader califican como "muy importante".
El buen comportamiento en la renta variable también se refleja en las cifras anuales y es que el Ibex 35 suma un avance del 6,73% en lo que va de año. Poco más de tres meses en los que una decena de compañías logran una rentabilidad en bolsa superior al 20%, destacando Acciona y Jazztel al subir un 47,32 y un 40,25%, respectivamente.
¿Qué pasó en Europa?
Aunque sí fue un actor principal, el Ibex no fue el único protagonista en Europa. Otro índice periférico, el italiano Ftse Mib con un alza del 1,38% -la segunda mayor subida- también alcanzó sus máximos del ejercicio.
"Lo más destacable ha sido ver como las bolsas periféricas han sido las que han vuelto a tirar del carro de unos alcistas que comienzan a encontrar serias dificultades para seguir avanzando una vez más en el resto de plazas", explica Joan Cabrero, analista de Ágora A. F. Los récords anuales no se celebraron solo en la periferia, también lo consiguieron el EuroStoxx 50 y el Cac 40, aunque con subidas del 0,6 y del 0,4%, en cada caso. Solo el Dax alemán, que cerró prácticamente plano, se quedó lejos de los máximos.
Al otro lado del Atlántico, Wall Street abrió con fuerza y el Dow Jones pasó intradía la barrera de los 16.600. A lo largo de la sesión fue perdiendo fuelle y al cierre del mercado europeo, tanto el Dow Jones como el S&P 500 protagonizaban tímidas caídas al ceder un 0,1% en ambos casos. Siguiendo así la estela del tecnológico Nasdaq 100, que retrocedía un 0,4%.
