
Faltan pocas sesiones para acabar el año y si el martes los alcistas se quedaban con la carta de la ley de la ventaja, en la del miércoles se la arrebataron completamente los bajistas, que provocaron caídas en los principales índices a ambos lados del Atlántico.
Carlos Doblado destaca de esta caída que "se ha producido desde resistencias y ha estado acompañada por un rebote en la volatilidad". Algo que podría aguar las esperanzas de aquellos que esperaban un estirón de final de año. "Si los inversores esperaban al cierre un rally alcista, la situación del miércoles lo ha complicado", concluye.
Pero no todo esta perdido todavía. A pesar de que el Nasdaq ha cedido en torno a un 1,15%, hasta los 2.267 puntos, ha logrado mantener su soporte clave a corto plazo, que se encuentra en la zona de los 2.210 puntos.
Mientras, la renta variable europea vivía también una mala sesión, como aventuraba un comienzo que no fue bueno y un final en el que las caídas se acabaron imponiendo e incrementando. Joan Cabrero, analista de Ágora A.F. para Ecotrader destacó que "las caídas ya han ajustado la mitad de la recuperación vista la semana pasada", para concluir que "los mínimos de la semana pasada siguen siendo la línea divisoria que separa un contexto alcista de uno potencialmente bajista".Y eso es de lo que vamos a estar pendientes ahora a corot plazo.
Fuerte tropiezo del euro
El euro fue una losa para la renta variable europea, ya que la 'moneda única' sufrió un fuerte castigo en su cruce frente al 'billete verde', contra el que sufrió un descenso en torno al punto porcentual y dejó atrás los 1,30 dólares.
Este descenso no es ninguna sorpresa. Carlos Doblado, jefe de estrategia de Ágora A.F., ya advertía hace días que era posible que el euro "deba acercarse más profundamente a la zona de soporte situada en niveles de 1,29/1,26 antes de que un nuevo intento de reestructuración del euro sea probable además de posible".
¿Y hoy?
Tras un miércoles sin apenas referencias económicas, el jueves estará plagado de citas tanto a un lado como a otro del Atlántico. En Estados Unidos se facilitarán las peticiones iniciales de desempleo, además del Índice manufacturero de Chicago y las ventas pendientes de viviendas, mientras que en suelo europeo será el turno para el IPC de Alemania y las ventas al por menor de España.