DAKAR (Reuters) - Alrededor de 40 inmigrantes africanos podrían haber muerto después de que la embarcación en la que viajaban tuviera dificultades de camino a Europa, antes de que consiguiera regresar a tierra en Senegal, dijo la policía en el país de África Occidental.
Muchas de las víctimas murieron de hambre y sed después de que se quedaran sin comida ni agua durante 12 días en el mar, mientras que otros cayeron enfermos, dijo Ndiaye a RFI.
El cayuco, que encalló en Yoff en las afueras de Dakar, es sólo una de las decenas de embarcaciones que se arriesgan a emprender el peligroso trayecto hacia las Islas Canarias cada año.
Los traficantes a menudo cobran miles de dólares por inmigrante y no equipan las embarcaciones con aparatos de navegación, motores fiables o suficiente combustible.
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