SEÚL (Reuters) - Los líderes de Corea del Norte y Corea del Sur anunciaron el miércoles que celebrarán su primer encuentro en siete años, una reunión cuyo valor fue cuestionado por los analistas, que dudaron de que vaya a ayudar al propósito internacional de lograr que el país comunista abandone sus armas nucleares.
Ambas partes se mostraron optimistas tras el anuncio, simultáneo e inesperado, del encuentro entre el presidente surcoreano Roh Moo-hyun y el líder de Corea del Norte, Kim Jong Il.
Primero se celebrará una reunión preparatoria en Kaesong, un polígono industrial del norte cerca de la zona fuertemente militarizada que ha dividido los dos países desde hace más de 50 años.
Pyonyang ha argumentado que Estados Unidos tiene primero que retirar sus 30.000 soldados del sur.
Corea del Sur celebra elecciones presidenciales en diciembre, y el actual partido en el poder pierde en las encuestas ante el Gran Partido Nacional, de centroderecha, que predica una línea más dura hacia Pyongyang.
La primera cumbre tuvo lugar en 2000 también en Pyongyang y fue alabada como un momento histórico que podía traer la paz en la última frontera de la Guerra Fría. Además contribuyó a reducir las tensiones y llevó a acuerdos de cooperación sin precedentes entre ambos estados.
/Por Jack Kim/