Fráncfort (Alemania), 9 may (EFECOM).- El Banco Central Europeo (BCE) dejará inalterados mañana los tipos de interés para la eurozona en el 3,75 por ciento pese a la fortaleza del euro, pero señalará una subida moderada para junio, según los expertos.
De los 51 analistas encuestados este mes por la agencia de noticias Dow Jones, 50 pronosticaron que el consejo de gobierno del BCE mantendrá las tasas en el nivel actual en su encuentro de mañana, que se celebrará en Dublín.
Los expertos dan por sentado que la institución europea dejará entrever, al mismo tiempo, que incrementará el precio del dinero en junio hasta el 4 por ciento para hacer frente a las presiones inflacionistas que observa en el área del euro y pese a la fortaleza de la divisa europea.
El euro se ha mantenido recientemente alrededor de 1,36 dólares y a finales de abril alcanzó un nuevo máximo histórico frente al billete verde de 1,3684 dólares.
"Una apreciación del euro frente al dólar mayor de lo esperado estaría contribuiría a unas tasas menores de crecimiento económico y de inflación, que hablarían en contra de unos tipos de interés del BCE más altos", dijeron los expertos de la aseguradora Allianz.
Los analistas del banco alemán Commerzbank consideraron que, aunque el BCE no ha mostrado hasta ahora preocupación por la subida del euro, la entidad hará hincapié mañana en que sus decisiones de política monetaria no están predeterminadas, para dejarse margen de maniobra por si la divisa común se aprecia aún más.
No obstante, el valor actual del euro no persuadirá al consejo de gobierno de llevar a cabo nuevas subidas de los tipos de interés, ya que la apreciación de la divisa se ha producido hasta ahora de forma ordenada, señaló el instituto de crédito Bank of America.
En vista del positivo desarrollo de la economía de la eurozona y de las perspectivas de que la inflación repunte en la segunda mitad del año, muchos expertos prevén que el BCE subirá los tipos al menos una vez más antes de finales de año, además del incremento de junio.
El Producto Interior Bruto (PIB) de la zona euro se incrementó un 3,3 por ciento en 2006 y aumentará un 2,6 por ciento este año, según la Comisión Europea (CE), que revisó esta semana al alza en 0,5 puntos porcentuales sus pronósticos de crecimiento para 2007.
En cuanto a la inflación en la eurozona, la tasa interanual bajó en abril en una décima, hasta el 1,8 por ciento, según el primer cálculo de la oficina de estadística europea, Eurostat.
Aunque el Índice Armonizado de Precios de Consumo (IAPC) se ha mantenido desde hace meses por debajo del máximo del 2 por ciento que establece el BCE como referencia para salvaguardar la estabilidad de precios, el banco ha subrayado que las presiones inflacionistas en la zona euro aún apuntan al alza.
En especial, la entidad ha advertido del riesgo que representa la fuerte expansión de la masa monetaria en circulación, que subió en marzo hasta el 10,9 por ciento, frente al 10 por ciento de febrero.
El miembro del consejo de gobierno del BCE y gobernador del banco central austríaco, Klaus Liebscher, dijo recientemente que no ve razón para la complacencia pese a la moderación de la inflación.
Según los expertos del banco alemán HypoVereinsbank, esta afirmación y otras similares hechas por algunos miembros del órgano ejecutivo del banco europeo muestran que la entidad está preocupada por las presiones inflacionistas a medio plazo, por lo que prevén una subida de las tasas hasta, incluso, el 4,5 por ciento este año.
Desde diciembre de 2005, el BCE ha incrementado el precio del dinero en 175 puntos básicos, a partir del 2 por ciento en el que habían permanecido desde junio de 2003. EFECOM
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