El regulador estadounidense, la SEC (Securities Exchange Commission), ha creado un nuevo grupo de investigadores para supervisar a las agencias de rating crediticio, que han sido duramente criticadas por su actuación durante la crisis financiera y sus repetidos fallos de valoración.
La SEC ya había adoptado una serie de medidas para aumentar la transparencia en las calificadoras de riesgos, que reciben sus ingresos precisamente de las compañías a las que tienen que valorar. Sin embargo, se necesita un mayor seguimiento, tanto mediante exámenes rutinarios como extraordinarios, de acuerdo con la tesis que previsiblemente defenderá hoy Mary Schapiro, presidenta de la SEC, en una vista en el Congreso de Estados Unidos.
"He ordenado a los miembros del regulador que barajen mejoras de la regulación en este área", recalcó ayer Schapiro en una comparecencia ante el subcomité de mercados de capitales del House Financial Services (comisión del Congreso encargada de los servicios financieros) recogida por el diario Financial Times.
Aprender de errores pasados
El plan es parte de una serie de cambios estructurales que se están llevando a cabo en la SEC, que se ha enfrentado a una avalancha de críticas en el último año por descuidar la vigilancia de las agencias de calificación y por fallar en la detección de fraudes financieros, especialmente el perpetrado por Bernard Madoff durante más de una década. En las próximas semanas, se espera la publicación de un informe de David Kotz, el inspector general del regulador, explicando qué fue lo que falló para que la estafa del ex-presidente del Nasdaq les pasara desapercibida.
Entre los cambios que Schapiro podría presentar ante el Congreso, figuran una mayor preparación de los trabajadores del regulador y diferentes maneras de afrontar los casos más sensibles, las calificaciones de compañías con un alto riesgo sistémico. "A pesar de que nunca seremos capaces de detectar absolutamente a todos los estafadores que defrauden a los inversores, creo que estos y otros cambios aumentarán mucho nuestras posibilidades de atraparlos", afirmó Schapiro.
"Desde luego, se lo debemos a los ciudadanos afectados por el caso Madoff. Tenemos que demostrarles que podemos y debemos adaptar nuestro sistema y aprender de errores pasados para que no se repitan. No pasa un sólo día sin que nos arrepintamos de no haber sido capaces de ver lo que estaba haciendo el ex gurú", sentenció la presidenta de la SEC.