
La alianza OPEP+, liderada por Arabia Saudí y Rusia, ha decidido este domingo aumentar su oferta de crudo en 547.000 barriles diarios (bd) a partir del 1 de septiembre, con lo que completa la restitución de 2,2 millones de barriles diarios (mbd) que retiró del mercado en 2023.
La decisión, en línea con lo esperado por los mercados, ha sido adoptada en una reunión virtual en la que han participado los ministros del sector de Arabia Saudí, Rusia, Irak, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Kazajistán, Argelia y Omán, ha informado la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en un comunicado.
"En vista de la estabilidad de las perspectivas económicas mundiales y de los sólidos fundamentos actuales del mercado, reflejados en los bajos inventarios de petróleo (...), los ocho países participantes implementarán un ajuste de producción de 547.000 barriles diarios en septiembre de 2025, a partir del nivel de producción requerido para agosto de 2025", especifica la nota. El grupo volverá a reunirse el 7 de septiembre para evaluar si vuelven a ajustar los niveles de producción.
Con el aumento sancionado hoy, el sexto mensual consecutivo, los citados 'petroestados' habrán revertido entre abril y septiembre los recortes voluntarios del bombeo que aplicaron de forma voluntaria en 2023 y que suman 2,2 mbd, adicionales a otras reducciones que ascienden a 3,66 mbd y, en principio, rigen hasta finales de 2026.
El plan inicial era devolver al mercado esos 2,2 mbd de forma gradual, en el plazo de un año y medio, pero, tras un incremento moderado en abril, aceleraron el proceso, de forma que lo habrán completado tan solo en seis meses, pese a arriesgar con ello un abaratamiento del "oro negro".
¿Cambio de planes de la OPEP+?
Los analistas ven un giro en la estrategia de la OPEP+ a favor de recuperar cuota de mercado asumiendo precios más bajos, en lugar de la política de apuntalar las tarifas mediante fuertes recortes de las extracciones.
La decisión de este domingo es la que se esperaba en los mercados, donde la perspectiva del aumento se vio reflejada en un marcado descenso de los precios del petróleo el viernes, dado que agita los temores a un exceso de la oferta petrolera.
La cotización del barril del crudo Brent cerró la última sesión de la semana a 69,67 dólares, un 3,94 % -2,86 dólares- menos que al término del jueves, mientras que el del petróleo intermedio de Texas (WTI) retrocedió un 2,79 %, hasta los 67,33 dólares.
Tensiones arancelarias
El abaratamiento ha sido propiciado también por las tensiones comerciales desatadas por la política arancelaria del presidente estadounidense, Donald Trump, y las persistentes dudas sobre el futuro de la demanda de combustibles fósiles.
Todo ello en un contexto de gran nerviosismo en medio de la incertidumbre creada por múltiples conflictos geopolíticos, que ha dado lugar a una enorme volatilidad de los precios este año.
Fundada en 1960 en Bagdad por Arabia Saudí, Venezuela, Irán, Irak, y Kuwait, la OPEP está hoy integrada por doce países. Además de los cinco fundadores, pertenecen a ella también los Emiratos Árabes Unidos, Argelia, Nigeria, Libia, Guinea Ecuatorial, Congo y Gabón.
En 2016, tras constatar que no podía frenar sola la caída de los 'petroprecios' desatada por el auge del petróleo de esquisto de Estados Unidos, pactó un acuerdo para cooperar con otros diez países, a saber, Rusia, México, Kazajistán, Azerbaiyán, Omán, Bahrain, Brunei, Malasia, Sudán y Sudán del Sur, creando la alianza OPEP+.
Desde hace varios años, Venezuela, Irán y Libia están exonerados del compromiso de ajustar su producción debido a las limitaciones involuntarias que afrontan sus industrias petrolíferas por diversas causas, desde sanciones hasta conflictos armados