
El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha asegurado que con la aprobación en Consejo de Ministros de varias condiciones a la OPA del BBVA al Sabadell, entre ellas la gestión autónoma de las entidades por al menos los próximos tres años, "se acaba la actuación del Gobierno en cuanto al proceso de autorización" por lo que ahora le tocaba decidir en primer lugar al BBVA si quería seguir adelante con esta operación, y en segundo y en última instancia, a los propios accionistas sobre el resultado mismo de la operación", en referencia a la decisión del BBVA de no dar su brazo a torcer.
Cuerpo ha indicado que "desde el punto de vista del Gobierno, hoy queremos asegurarnos que esta condición (la no absorción en tres años) se cumpla, porque va a permitir, y esto es importante, que el desarrollo de valor para los accionistas de ambos bancos sea compatible con la protección de los intereses generales, tanto de los trabajadores como de, por supuesto, las empresas que tienen acceso a financiación a través de las dos entidades, como también el conjunto de clientes, sobre todo en materia de inclusión financiera y el apoyo de las redes sucursales de ambas entidades".
Preguntado por los periodistas durante su intervención en una mesa redonda junto a Nadia Calviño, presidenta del Banco Europeo de Inversiones, y otras autoridades, el ministro ha asegurado que "este mensaje de compatibilizar ese desarrollo de valor para el sector privado con la protección de los intereses generales es el elemento esencial para nosotros a la hora de imponer esta condición, que además, como dijimos también la semana pasada, es una proporcionada y equilibrada".