
Hay muchos factores que condicionan la toma de decisiones a la hora de elegir una compañía, sector o índice en el que invertir. A veces se utiliza un indicador en particular o una selección de ellos. Es todo lo contrario a hacer una cartera al azar. Una de las métricas que más se tiene en cuenta en la selección de valores son los multiplicadores de beneficios. El PER, que es el número de veces que el beneficio se recoge en el precio de la acción y que indica, a grandes rasgos, cómo de barata o de cara está una acción.
Pues bien, esta filosofía de inversión, ligada al modelo value, no siempre funciona, pero este año 2024 sí lo ha hecho. La prueba más clara es que si a comienzos de año se hubiese seleccionado una cartera con los cinco valores que por entonces cotizaban con los multiplicadores más bajos, la rentabilidad obtenida hasta ahora superaría el 42%, más del triple de la evolución del propio Ibex 35, que se anota algo más de un 13%.
Estas compañías son IAG, Repsol, Sabadell, Unicaja y Santander, todas ellas con revalorizaciones de doble dígito en el año salvo Repsol, que se deja casi un 20%. Por el contrario, si se hubiese hecho una cartera con las cinco empresas más caras por PER a 1 de enero, el rendimiento se hubiese quedado por debajo del 8%, 5 puntos menos que el selectivo.
La firma que comenzaba el año con los beneficios más baratos del Ibex era IAG. La aerolínea anglo-española apenas cotizaba a un PER de 4,6 veces después de varios años complicados a causa de la digestión de los efectos derivados de la pandemia sobre su negocio, la recuperación del tráfico y la gestión de la deuda. Todos estos vientos han sido de cola este año, en el que ha doblado su valor. Y, pese a ello, los analistas siguen recomendando comprar sus títulos.

"Pensamos que se verá impulsada por una demanda sólida, vuelta al dividendo, menores costes de combustible y fortaleza del balance", apuntan en Bankinter. "La capacidad y la ocupación evolucionan positivamente y reflejan la fortaleza de la demanda", siguen. "Una vez descartada la compra de Air Europa podría optar por TAP Portugal, que podría permitirle aprovechar esta mayor demanda en mercados en los que cuenta con reducida presencia", concluyen.
La siguiente compañía que entraba a 2024 con un PER más bajo fue Repsol, cuyos beneficios de este año se podían comprar por solo 4,7 veces. En este caso eso no fue suficiente para que los inversores apostaran por este valor durante el curso, habiéndose dejado casi un 20% de su valor a causa de los vaivenes del precio del crudo y del gas y de la debilidad en el negocio del refino.
"Tras unos resultados débiles en el tercer cuarto del año, afectados por la caída del precio del petróleo y menores márgenes de refino, Repsol sigue contando con un balance saneado y cotiza a unos múltiplos atractivos, ofreciendo una elevada remuneración al accionista", exponen en Bankinter. "Sin embargo, pesa la falta de atractivo del sector", concluyen.
Los otros tres títulos que aparecerían en esta hipotética cartera son bancos. Sabadell, Unicaja y Santander cotizaban, antes de comenzar el año, a múltiplos inferiores a 6 veces PER. Los beneficios del sector se habían disparado gracias al entorno de tipos altos que el BCE mantenía para contener la inflación. Y, pese a que en el parqué ya habían comenzado a repuntar, todavía se podían comprar muy baratas. Estas tres compañías se han revalorizado este año un 65, un 40 y un 15%, respectivamente.
¿Qué firmas son los 'chollos' para 2025?
Una vez demostrado que comprar barato sale rentable, al menos en 2024, ¿qué cartera de cinco valores habría que comprar para iniciar 2025? Tres de ellas repetirían: Repsol, Santander e IAG, y se sumarían ArcelorMittal y BBVA. Esta última se ha quedado rezagada de las subidas del sector bancario de este año al ser penalizada por la opa lanzada sobre Sabadell. Los analistas le dan cerca de un 20% de recorrido al alza de cara a los próximos 12 meses.
En el caso de ArcelorMittal, 2024 no ha sido un año fácil y sus títulos se han dejado más de un 13% en el parqué ante la debilidad del precio de los metales y el alza de los costes de producción. "A corto plazo el entorno de mercado sigue siendo complejo, si bien Arcelor mantiene una buena posición financiera y capacidad de generación de caja, con una política de retribución al accionista y recompras de acciones", señalan en Bankinter. "A pesar de una buena gestión operativa y financiera, la compañía no deja de estar en un sector muy expuesto al ciclo económico", siguen. "El precio del acero se mantiene estable aunque a niveles muy bajos, pero el bajo nivel de inventarios debería favorecer la recuperación de la demanda", concluyen. Cotiza a un multiplicador de beneficios de 5,8 veces, con un potencial del 21% y una recomendación clara de compra.