
Las miniaturas de universos de fantasía medieval, y de guerras futuristas, se están haciendo un nombre a respetar en la bolsa británica. El clásico juego Warhammer, que lleva ya casi 4 décadas de historia, no ha dejado de crecer en los últimos años. La empresa matriz, Games Workshop, ha acelerado sus ingresos y sus beneficios desde el año 2017, y su cotización en bolsa se ha disparado en los últimos 8 años un 1.876%, es decir un 45,8% anualizado en este periodo. La semana pasada puso la guinda del pastel: después de mejorar su previsión de ingresos, las acciones de la firma subieron un 17% el viernes, un repunte que ha permitido a la firma aumentar su capitalización en 642 millones de libras en un solo día. Ahora toda la compañía, que sigue abriendo nuevas vías de negocio relacionadas con el universo que creó hace ya 46 años, y prepara nuevos contenidos audiovisuales con un pacto con los estudios cinematográficos de Amazon, alcanza los 4.500 millones de libras en valoración, y está llamando a la puerta del índice de bolsa más importante de Reino Unido: el FTSE 100, donde cotizan las grandes 'blue chips' británicas.
Lo que empezó en 1975 como una pequeña empresa dedicada a fabricar tableros para juegos de mesa como backgammon, mancala o Go, terminó pocos años después convirtiéndose en todo un universo de fantasía, ambientado en un mundo hermano del que creó J. R. R. Tolkien a principios del siglo XX. Enanos, elfos oscuros, hombres rata, y hasta un lore futurista con marines del espacio y una raza de orcos que había logrado perpetuarse hasta la era de las naves espaciales, han ido ganándose a varias generaciones de aficionados a las miniaturas y a los juegos de rol, y Games Workshop lleva ya casi 50 años haciendo caja con ello.
El negocio ha sido tan próspero que la compañía ha terminado llamando a las puertas del club más selecto de la bolsa británica: el índice FTSE 100, que recoge las cien empresas más importantes del mercado cotizado de Reino Unido. Según explica la agencia Bloomberg, ya hay algunos analistas que empiezan a plantear la inclusión de la compañía en el principal selectivo inglés, una decisión de la que habrá más información este martes, cuando FTSE Russell anunciará las empresas que optan a la entrada en el selectivo, decisión que se tomará el próximo 3 de diciembre.
La capitalización bursátil de las empresas es la clave para la incorporación al selectivo, ya que el índice recoge las 100 empresas más grandes por capitalización dentro de la bolsa de Londres, siempre y cuando cumplan los criterios de liquidez necesarias. Y en este caso, Games Workshop ya tiene la capitalización suficiente para entrar a formar parte del FTSE 100, ya que, después de la subida que experimentó el viernes la compañía, su capitalización bursátil ha escalado hasta los 4.500 millones de libras, un nuevo récord para la empresa, que la colocaría, según los datos de Bloomberg, como la número 73 más grande de toda la bolsa británica.
La entrada de la empresa en el FTSE 100 puede suponer un nuevo impulso para las acciones de la firma, ya que los fondos que replican el comportamiento del selectivo británico se verían obligados a comprar acciones de la empresa para poder emular correctamente los movimientos del índice.
Un crecimiento disparado desde 2017
El gran salto de Games Workshop se produjo en 2017. Hasta ese año, la empresa se había movido siempre por debajo de los 300 millones de libras de capitalización. Fue entonces, en 2017, cuando los ingresos y los beneficios de la firma empezaron a dispararse rápidamente, dando lugar a un rally bursátil que se ha prolongado en los últimos 8 años, aunque se hayan producido vaivenes entre medias.
En los últimos 8 años las acciones de la empresa se han revalorizado más de un 1.870%, o lo que es lo mismo, un crecimiento de casi el 46% interanual en ese periodo. El incremento de precios que se vivió el viernes pasado tuvo su origen en la mejora de perspectivas que ha presentado la empresa, que ahora reconoce que alcanzará unos beneficios antes de impuestos de 120 millones de libras en los primeros seis meses de 2024, un crecimiento del 25% frente al mismo periodo del año anterior, y que supera las expectativas que había hasta este momento.
¿Cómo ha logrado Games Workshop pegar un acelerón en su negocio? La empresa se divide en tres patas: retail, trade y licensing, y las tres han mostrado un crecimiento fuerte en los últimos años. Fue en 2017 cuando las cifras de ingresos empezaron a repuntar con fuerza, y han mantenido un crecimiento sostenido desde entonces, todos los años. En 2016 Games Workshop había cerrado el año con 118 millones de libras en ingresos, una cantidad que creció un 33,8% en 2017, y continuó en los siguientes años: un 39% anual en 2018, un 16% en 2019, un 5% en 2020, un 37% en 2021… así, hasta llegar a los 525,7 millones de dólares en el ejercicio fiscal 2024, el mejor año de su historia (el año fiscal se cerró el pasado mes de agosto).
La compañía ha conseguido incrementar el peso que tiene su negocio de 'trade', que consiste en las ventas a establecimientos que tienen sus productos, pero que no son parte de la red de tiendas Games Workshop, hasta convertirlo en su principal pata de negocio, con un 54,9%, frente al 22% que suponen las ventas en sus propias tiendas (negocio 'retail') y al 17,7% del negocio online. Llama la atención que este último, en plena era digital, está perdiendo peso para la firma año tras año en relación al negocio tradicional, aunque las ventas online también estén subiendo todos los años. El consumidor sigue queriendo las clásicas miniaturas y acudir a los establecimientos físicos, donde Games Workshop ha conseguido crear una sólida comunidad de fans.
Pero no todo es pintar miniaturas y jugar con ellas en un tablero físico: parte del crecimiento de la compañía se ha conseguido gracias al lanzamiento de contenidos relacionados con el juego, como libros, revistas o incluso cortos que se emiten en un canal de streaming, Warhammer+, que ya cuenta con más de 170.000 suscriptores. Además, la compañía ha lanzado varios videojuegos, en colaboración con otros títulos famosos, que también se han hecho un hueco en este universo.
El último gran paso para la firma ha sido el acuerdo con Amazon, anunciado el pasado mes de diciembre, para preparar nuevos proyectos audiovisuales, ya sea películas o series, en los próximos años. En este proyecto está involucrado el famoso actor Henry Cavill, quien, siendo un fan de Warhammer desde niño, ha firmado un acuerdo para protagonizar, escribir y producir futuro contenido de Warhammer 40.000. Estas colaboraciones están viéndose amenazadas, ya que, recientemente Games Workshop ha anunciado que Amazon Studios podría perder los derechos si no se avanza en el desarrollo de los planes de las producciones antes de diciembre.
Se cierre o no este proyecto, lo que está claro es que el universo Warhammer está más vivo que nunca, hasta el punto de poder convertirse en una de las empresas de más prestigio de la bolsa británica, si finalmente entra a formar parte del FTSE 100 en los próximos meses.