
Este lunes, 7 de octubre, se celebra el Día de la Educación Financiera y son muchos los actos que lo rodean para recordar que es muy necesario mejorar en esta asignatura aún pendiente en España, algunos organizados por instituciones como el Banco de España o la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De hecho, ambas colaboran en el Plan de Educación Financiera que se elabora cada cuatro años desde 2008. Lo cierto es que "queda mucho por hacer y, como sociedad, debemos hacer un esfuerzo conjunto para avanzar aún más. Los indicadores y los datos sobre los conocimientos financieros no son buenos. Tampoco en otros países de nuestro entorno. Aunque han mejorado en los últimos años, no debemos estar satisfechos con ello", valora Rodrigo Buenaventura, presidente la CNMV, a este periódico.
Mejorar la educación financiera es clave para el día a día de los ciudadanos, pero también para que los ahorradores puedan elegir convertirse en inversores que sepan y conozcan los productos y las opciones que tienen a su disposición. Sobre todo, pensando en el largo plazo, en busca de un ahorro complementario a la pensión pública. "La falta de educación financiera impacta de manera significativa en la capacidad de los ciudadanos para tomar decisiones de inversión adecuadas. Sin una comprensión clara de estos conceptos clave es difícil evaluar las características y riesgos de los productos financieros, lo que incrementa la posibilidad de que tomen decisiones inadecuadas. Este desconocimiento no solo afecta a las decisiones de inversión inmediatas, sino que también en la planificación financiera a largo plazo", destaca Buenaventura.
Para todo ello se necesitan esfuerzos conjuntos. "Tanto la labor de las instituciones educativas como del sector privado es esencial. Las instituciones educativas tienen la responsabilidad de realizar actividades de utilidad pública, y mejorar los contenidos educativos en el currículum desde edades tempranas. Con ello, los estudiantes podrían adquirir las competencias necesarias para gestionar sus finanzas de manera responsable a lo largo de su vida. Por otro lado, el sector privado, especialmente el financiero, desempeña un papel crucial al impulsar la educación financiera aportando recursos, capacitación e innovación tecnológica también con los millones de clientes que tienen", apunta el presidente de la CNMV.
No obstante, poco a poco se va avanzando. Buenaventura subraya que en el Plan de Educación Financiera, "hemos visto importantes progresos a lo largo de estos años. Por ejemplo, el sector privado ha intensificado sus esfuerzos mediante alianzas público-privadas, que han dado lugar a la creación de programas y recursos de educación financiera dirigidos a diversos públicos: jóvenes, personas mayores, trabajadores y aquellos en riesgo de exclusión financiera".