
El selectivo español se acerca a máximos del día tras la publicación del ISM manufacturero y los gastos en construcción de abril en EEUU, que han sido mejor de lo previsto.
"La resistencia creciente frena las subidas intradía y los índices europeos cotizan a esta hora en los mínimos intradía. Con todo, seguimos considerando que la información relevante la tendremos al cierre de la sesión, que es cuando podremos valorar si los alcistas han logrado romper los máximos de las últimas cuatro semanas, que es donde de forma general se localizan las resistencias", señalaba Bolságora en el flash intradía de Ecotrader.
"Es más, pese a caídas intradía no habrá debilidad destacable mientras siga abierto el hueco generado al alza en la apertura", añadían
Semana importante en los mercados
La desesperada situación de General Motors, que hoy puede declararse en bancarrota pese a los esfuerzos personales del propio Obama, domina todos los titulares y la atención de los inversores a muy corto plazo. Pero el mundo seguirá girando aunque GM quiebre, y la pregunta es si el rally también puede continuar después de esta noticia.
La fortaleza del mercado durante la semana pasada y el hecho de que las acciones y los bonos de GM ya descuenten de sobra la quiebra apuntan en esa dirección, pero dependerá de una avalancha de datos económicos que se publicarán en los próximos días. Entre ellos, el importantísimo dato de paro de mayo, para el que se espera una aceleración hasta 550.000 nuevos desempleados.
Claro que también puede ocurrir que GM se salve a última hora -no sería tan raro, ha ocurrido con unos cuantos bancos después de la quiebra de Lehman- y, en ese caso, los analistas creen que el mercado tendrían el detonante que andan buscando para romper definitivamente al alza las resistencias críticas a las que se enfrentan y con las que no pudieron la semana pasada.
Como saben, los índices en EEUU y Europa están intentando superar los niveles que frenaron su escalada a principios de mayo, después de una consolidación lateral en las últimas semanas que ni siquiera merece el nombre de corrección. Si consiguen romper de forma sostenible estos niveles -el Ibex 35 ha vuelto a adelantarse al resto con su proverbial capacidad de anticipación-, tendremos una confirmación alcista de primer orden; si fracasan de nuevo, se abrirá la puerta a una corrección de verdad y a la posibilidad de volver a los mínimos de marzo.
Así pues, la semana que hoy comienza puede ser verdaderamente decisiva. Una semana en la que no hay que perder de vista otros mercados, como los bonos después del batacazo de la pasada ante la avalancha de nuevo papel en todo el mundo; se supone que descuentan la vuelta de la inflación, pero la escalada de los tipos a largo -a los que se referencian las hipotecas- puede hacer peligrar la recuperación económica. O las divisas, donde la caída del dólar está cogiendo velocidad de crucero. O el petróleo, que ya anda por 66 dólares anticipando claramente una mejoría de la demanda.